Espectáculos

"The Simpsons", reflejo de la sociedad

NUEVA YORK  - A lo largo de los años "The Simpsons" ha cambiado intentando adaptarse a los tiempos, en la mayoría de los casos en respuesta a las críticas que recibió por representaciones mal concebidas de minorías étnicas y sexuales, admitió su creador Matt Groening.

Según Groening, volver a ver la serie es como revivir una maduración mutua, tanto de los guionistas como de los televidentes.

La serie de la familia amarilla atravesó, a través de 32 temporadas (todo un récord) diferentes décadas y cambios sociales extremos, tanto en Estados Unidos como en el mundo.

Un largo informe de NBC News publicado hoy destaca que, "al volver a mirar la serie, puede ser discordante ver una parodia de un evento que se retrataría de manera totalmente diferente ahora".

Según el informe, volver a ver "The Simpsons", que ahora se pueden ver completos en el canal Disney +, permite "revivir noticias virales olvidadas mencionadas por el programa de forma indirecta o en parodia".

Cita como ejemplo, el capítulo "Bart vs Australia", "en la que el primer ministro australiano condena a Bart a ser 'pateado', parodia de una noticia sobre el adolescente estadounidense Michael Fay, quien fue azotado por las autoridades de Singapur como castigo por vandalismo".

Destaca además que la serie tiene "un léxico increíble de chistes de oro macizo, interpretaciones perfectas, detritos culturales y los feos prejuicios de nuestra sociedad: una instantánea detallada de Estados Unidos en un momento dado".

Para muchos, Homer Simpson, el padre de la familia, representa al estadounidense promedio, amante de la comida chatarra, ansioso por adquirir cualquier producto que le ofrezcan (aunque no lo necesite) y con una carencia cultural notable.

Según NBC News, "al volver a mirar la serie, puede ser discordante ver una parodia de un evento que se retrataría de manera totalmente diferente ahora (y tal vez debería haber sido retratado de manera diferente entonces)".

Cita como ejemplo el capítulo de 1994 "The Boy Who Knew Too Much", que sigue a Bart mientras lucha con el conocimiento de que el sobrino borracho del alcalde Quimby es inocente de agredir a un mesero en una fiesta.

Es una parodia del juicio del vástago de la familia Kennedy, William Kennedy Smith, que había sido acusado de violar a una mujer que conoció en un bar de Florida mientras salía con Ted Kennedy, su tío, durante el fin de semana de Pascua de 1991.

Si bien fue absuelto ese diciembre, más de una década después, sus empleadores revelaron que Smith había violado a su asistente personal en 1999.

"Y como los personajes se han mantenido estáticos, 'The Simpsons' se ha convertido accidentalmente en un triste comentario sobre el declive del país al otro lado de la pantalla", destacó NBC News.

Al comienzo del programa en 1989, Homer era el típico hombre común con tres hijos, una esposa que no trabajaba, dos autos y una casa de su propiedad. Al final de la tercera temporada, se había establecido firmemente que también era un bobo holgazán cómodo en un trabajo sin futuro que se casó con la chica que quedó embarazada en la escuela secundaria (de la que no se graduó) y nunca fue a la universidad. En 2021, estos primeros episodios parecen piezas de época