Internacional

Rusia y Estados Unidos intercambian advertencias sobre Siria

Rusia/ EEUU - El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió a Rusia de que se prepare para una actuación con misiles contra Siria, en represalia por el supuesto ataque químico perpetrado por el régimen de Asad en la ciudad siria de Duma.

"Rusia promete derribar todos los misiles disparados contra Siria. Prepárate Rusia, porque van a ir, suaves y nuevos e "inteligentes!", amenaza Trump en su cuenta en Twitter. Trump afirma que Rusia no debería asociarse "con un animal que mata con gas a su gente y disfruta!", en referencia al presidente sirio, Bachar Al Asad.

Las advertencias de Trump se producen poco después de que el Kremlin alertara a Estados Unidos y sus aliados en contra de cualquier acto que pueda desestabilizar la "frágil" situación en Siria.

¿Qué buscan Washington y Moscú en Siria?

Por otra parte, la portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, sugirió en un mensaje de respuesta al trino del presidente de EEUU, Donald Trump, sobre un inminente bombardeo, que los misiles con los que EEUU quiere atacar Siria pueden destruir las pruebas del uso de armas químicas en ese país,

"¿Los inspectores de la OPAQ (Organización para la Prohibición de las Armas Químicas) ya saben que los misiles inteligentes van a eliminar ahora todo rastro del uso de armas químicas?", se preguntó Zajárova en un mensaje publicado en su cuenta de Facebook.

Turquía se cura en salud y critica Asad

Por su lado, el ministro de Exteriores de Turquía, Mevlüt Çavusoglu, acusó al régimen sirio de emplear armas químicas y exigió a su líder, Bachar al Asad, que abandone el poder para iniciar un proceso político en el país árabe.

"El régimen de Asad debe abandonar el gobierno de Siria. No es la primera vez que emplea armas químicas. Ha matado a cerca de un millón de personas con sus bombardeos. Es necesario pasar a un proceso político", dijo Çavusoglu durante un discurso en Ankara.

El jefe de la diplomacia turca hizo así referencia al supuesto ataque con armas químicas contra la población de la localidad de Duma en Guta Oriental, cerca de Damasco, el sábado pasado.

El Ministerio de Exteriores turco ya condenó el ataque "tajantemente" el domingo, señalando que había "fuertes sospechas" de que hubiera sido perpetrado por el régimen de Asad.

El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, sin embargo, fue más cauteloso ayer al condenar la masacre y vaticinar que sus responsables "pagarán un alto precio, sean quienes sean", sin atribuirla a ningún bando.