Ciudad de México.- Como parte de los trabajos de seguridad bilaterales entre México y Estados Unidos, se informó sobre el cierre de una selecta unidad de antinarcóticos en nuestro país que, durante un cuarto de siglo, operó de la mano con la agencia antidrogas de Estados Unidos (DEA) en el combate al crimen organizado, lo que representa un duro golpe a la cooperación bilateral de seguridad.

Se trataba de un grupo de las unidades de investigaciones especiales (SIU) que opera en cerca de 15 países y que los funcionarios estadounidenses consideran invaluables para el combate a capos de la droga.

A pesar de estar bajo el control de los gobiernos nacionales, son entrenadas por la DEA.

Las SIU han trabajado en los casos de detención más importantes de México, como la de 2016 de Joaquín El Chapo Guzmán, en ese entonces cabecilla del poderoso Cártel de Sinaloa.

 El cierre de esta unidad especial amenaza con poner en riesgo los esfuerzos de Estados Unidos para el combate a los grupos de crímen organizado de México.

 Durante abril de 2022, el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador notificó a la DEA que había sido clausurada la unidad de operaciones.

 El cierre de esta unidad podría resultar grave para las calles de Estados Unidos, pues sus autoridades luchan por reducir un aumento a las sobredosis de narcóticos en el territorio, mismas que han provocado más de 100 mil muertes en la población.

De igual forma el exjefe de operaciones internacionales de las DEA, Mike Vigil señaló que el cierre de la SIU, así como la restricción de la cooperación en seguridad, afectarán a ambos países pues:

 “Significará más drogas yendo a Estados Unidos y más violencia en México”.