Afganistán  - Al menos 31 personas han muerto en un ataque suicida perpetrado en un centro de registro de votantes en el oeste de Kabul, informaron hoy (22.04.2018) fuentes gubernamentales.

El portavoz del Ministerio de Salud Pública del país, Wahid Majro, indicó que otras 54 personas resultaron heridas. La cifra de muertos ha aumentado considerablemente desde que el ataque fue reportado inicialmente.

El grupo terrorista Estado Islámico (EI) reivindicó la autoría del atentado. Un comunicado del EI difundido en Telegram, cuya autenticidad no ha podido ser verificada, identifica al perpetrador como Qari Omar al Bishauri, a quien califica como un "mártir".

Según el texto, el terrorista se dirigió a un grupo de electores "herejes" y "politeístas", y detonó un chaleco explosivo que habría causado 40 muertos y 60 heridos.

Hashmatullah Stanekzai, portavoz de la Policía de Kabul, indicó a Efe que "casi todos los muertos y heridos son civiles".

La explosión se produjo alrededor de las 10.00, hora local (5.30 GMT) en el área de Qala-e-Nazir, cuando un suicida se inmoló entre la gente que aguardaba en cola para registrarse en un centro de votación. En la fila había "un gran número de personas, incluidas mujeres ", indicó Stanekzai.

El centro de registro se encuentra en un barrio con gran población de la minoría religiosa chií hazara, habitual objeto de atentados por parte del grupo terrorista Estado Islámico.

El portavoz talibán Zabihullah Mujahid indicó en la red social Twitter que el Emirato Islámico, como se autodenominan los talibanes, no tiene nada que ver con el atentado.

El proceso de registro de votantes para las elecciones parlamentarias del próximo octubre comenzó la pasada semana en Kabul como parte de un proceso que continuará durante las próximas semanas.

En lo que va de año, la capital afgana ha sido objeto de varios atentados, el más importante perpetrado a finales de enero por los talibanes con una ambulancia bomba que explotó en el medio de la calle en un céntrico barrio de Kabul y mató a más de un centenar de personas.

Tras ese ataque, las autoridades de la capital han revisado todo el plan de seguridad de la ciudad y lo han sustituido para evitar grandes atentados.

El presidente afgano, Ashraf Gani, llamó a finales de febrero a los talibanes a sentarse en la mesa de negociación para encontrar una solución pactada al conflicto que vive el país desde la invasión estadounidense en 2001.