Editoriales

La corrupción de banqueros se perdona

Orlando Salinas es un ejecutivo, o más bien ex ejecutivo, de casa de bolsa Banorte-IXE que defraudo a 30 clientes de esa institución en más de 1,600 millones de pesos 8mdp) durante al menos 15 años. 

El fraude está documentado puesto que Salinas manejaba doble contabilidad usando falsificaciones de estados de cuenta para engañar a los clientes y sustrayendo ciertas cantidades de dinero de sus cuentas y operaciones, una práctica que no invento el sino que viene de bancos como Wells Fargo en los Estados Unidos que se ha visto envuelto en un gran escándalo por eso.    Según los abogados  de los clientes defraudados, Noé Quintanilla y Luis Garza Villarreal;  Salinas conto “necesariamente” con la complicidad de otros funcionarios de Banorte-IXE  lo cual es preocupante –dicen--como también sería preocupante que hubiera actuado solo.   

El asunto se dio a conocer a finales de junio de este año y entonces Salinas salió del país pero este semana ya fue “vinculado a proceso” aquí en Nuevo León y no será encarcelado puesto que esa medida cautelar, la de presión preventiva, no pudo ordenarla el juez de control puesto que Salinas tiene un amparo.  

 Tanto salinas como los demás ejecutivos de Banorte-IXE presuntamente involucrados no está siendo perseguidos ni han sido motivo de burla o escarnio en las redes sociales  y la prensa casi no se ocupa de ellos como si lo hacen con los ex gobernadores de Veracruz o de Q. Roo, Javier Duarte y Beto Borge. ¿Por qué?. Seguramente porque quieren hacernos creer que la corrupción es solo de los políticos pero nunca del sector privado