Internacional

Shimon Peres, el ganador del Nobel que murió sin ver cumplido sueño de paz en Oriente Medio

JERUSALí‰N - El ex primer ministro israelí­ Shimon Peres murió el miércoles a los 93 años sin ver cumplida su visión de un Oriente Medio renovado en base al acuerdo interino de paz de 1993 que ayudó a delinear junto a los palestinos.

Pero el estadista más eminente de Israel ganó reconocimiento a nivel mundial y un Premio Nobel de la Paz como un sí­mbolo de esperanza en una región asolada por guerras avivadas por profundas divisiones religiosas y polí­ticas.

Peres fue hospitalizado luego de sufrir un derrame hace dos semanas y habí­a mostrado una mejorí­a antes de un repentino deterioro de su condición el martes, dijeron los médicos. Al anunciar su fallecimiento, sus familiares dijeron que no sufrió y ofreció donar sus córneas para un trasplante.

"No se olviden de ser osados y curiosos y de soñar en grande", dijo Peres este mes en su página de Facebook a los alumnos que comenzaban la escuela primaria. El comentario parecí­a resumir su propio credo.

En una carrera polí­tica de casi siete décadas, Peres, quien fue cuidador de ovejas en un kibbutz, formó parte de una decena de gabinetes y fue dos veces primer ministro de Israel de la mano del Partido Laborista, aunque nunca ganó una elección general en cinco intentos entre 1977 y 1996.

"Soy un perdedor, porque perdí­ elecciones. Pero soy un ganador, porque he servido a mi gente", dijo una vez Peres, quien entre el 2007 y el 2014 fue presidente israelí­, un puesto mayormente ceremonial.

Peres compartió el Nobel con el asesinado primer ministro Isaac Rabin y el fallecido lí­der palestino Yasser Arafat por alcanzar, en 1993, un acuerdo de paz interino que nunca se fortaleció como un tratado duradero.

Cuando un israelí­ de extrema derecha que se oponí­a al acuerdo de paz asesinó a Rabin en noviembre de 1995, Peres lo sucedió en el cargo de primer ministro.

Pero los ataques de suicidas palestinos con bombas que dejaron decenas de israelí­es muertos y una agresiva campaña del Likud dañaron la popularidad de Peres, quien perdió la elección de 1996 ante Benjamin Netanyahu por menos de 30.000 votos.

En el 2000, el fracaso de las negociaciones sobre el estatus final de paz con los palestinos y un levantamiento palestino plagado de atentados suicidas dañaron más a la izquierda de Israel y las perspectivas de liderazgo de Peres.

En el 2005, Peres abandonó el laborismo para unirse al partido Kadima del entonces primer ministro Ariel Sharon. Tras la victoria de Kadima en el 2006, Peres fue viceprimer ministro.

Nacido en 1923 en lo que actualmente es Bielorrusia, Peres emigró una década más tarde a la Palestina gobernada por Gran Bretaña. David Ben-Gurion le vio potencial para ser lí­der, y Peres controló compras de armas y mano de obra en la fuerza de choque sionista Hagana antes del establecimiento de Israel.

A Peres se le adjudica que Israel haya conseguido una capacidad nuclear al obtener el reactor secreto Dimona de Francia durante su paso por el Ministerio de Defensa en la década de 1950. Como lí­der de esa cartera, supervisó el rescate de israelí­es secuestrados en un aeropuerto de Uganda en 1976.

En su primer periodo como primer ministro, Peres retiró las tropas israelí­es del Lí­bano, normalizó las relaciones con Egipto e hizo que la inflación bajara de un 445 por ciento al año a menos de un 20 por ciento.

Peres era visto en el exterior como un diplomático sofisticado, pero en Israel era percibido como un ególatra manipulador. El lí­der, quien escribió varios libros, sobrevivió a su esposa Sonia, quien falleció en el 2011. A su muerte deja dos hijos y una hija.