María Lembrun, dama de honor de María Estuardo, quiso vengar la muerte de su señora asesinando a la reina Isabel. Viajó de Escocia a Londres armada con dos pistolas. Esperó a que la reina estuviera descuidada y cuando paseaba por el jardín se le abalanzó para dispararle pero un guardia la detuvo. La llevaron ante la reina quien quería saber el motivo, y la joven le explicó que quería vengar la muerte de María Estuardo.

 _Juzga tú misma, le dijo la reina ¿qué debo hacer contigo? ¿debo juzgarte como juez o como reina?

_Como reina, y entonces debes perdonarme.

_¿Y cómo me garantizarías que no repetirás tu estupidez?

_Un perdón con condiciones no es un perdón, le dijo la joven.

_Eres la primera persona que en treinta años de reinado me ha dado una buena lección, dijo la reina otorgándole el perdón.