04/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

 

Mayo 19 de 1972: gana el neoleonés Clemente Sánchez Xicoténcatl en Tokio, Japón, el campeonato mundial de peso pluma. El nuevo campeón había nacido en la colonia Industrial de Monterrey, el 9 de julio de 1947, siendo hijo de Horacio Sánchez, un boxeador profesional que no destacó, pero promovió a su hijo para que entrara al boxeo, tras haber estudiado la preparatoria. Clemente ganó varios torneos de los Guantes de oro y debutó a los 16 años bajo la dirección del manager local, Jesús “La pipa” Espinosa. Su principal característica como boxeador era su fuerte pegada, y ganaba por nocaut en los primeros rounds. El problema de Clemente siempre fue el peso, ya que no era disciplinado para la ingesta de alimentos y terminaba sin comer los días previos a sus peleas. En 1967 –a los 20 años de edad- Clemente Sánchez derrotó a Ricardo Arredondo, ex campeón mundial ligero, aunque después perdió con el tamaulipeco Rogelio Lara. Se dedicó a entrenar y regresó triunfando contra Raúl Vega, Ray Vega, Germán Bastidas, quien había vencido a Rubén Olivares; y contra Fernando Sotelo ex campeón pluma de México.  Retó al campeón mundial Kunaki Shibata, quien había noqueado al campeón mundial mexicano Vicente Saldívar, así que obtuvo la oportunidad de pelear contra el campeón, pues se pensaba que sería pieza fácil. El apoderado de Sánchez, el abogado Rubén Zarazúa jugó un papel relevante para conseguir la oportunidad de la pelea de campeonato. Desde el día diez de mayo viajaron Clemente, Espinosa y Zarazúa a Tokio, y el día 19 de mayo de 1972 se dio la pelea a 15 rounds por el campeonato mundial de peso pluma. Clemente Sánchez sabía que no tendría otra oportunidad, así que salió a echar el resto en el ring. Los primeros dos rounds fueron para el mexicano y en el tercero, con una serie de golpes derribó al oriental que ya no pudo levantarse en la cuenta hasta diez. 

México y Monterrey obtuvieron el campeonato mundial de peso pluma, y todos lo disfrutamos porque desde que Lauro Salas le había dado un campeonato mundial a nuestra Ciudad, nadie había conseguido tal hazaña. 

Sin embargo, Clemente continuó teniendo problemas con la báscula y, en su primera defensa contra el cubano José Legrá, perdió la corona, no en el ring, sino en la báscula, al no dar el peso reglamentario de 57. 5 kilogramos, aunque de todas formas pelearon a diez rounds y el cubano le dio una paliza al debilitado Clemente. 

Luego llegó la tragedia el 25 de diciembre de 1978 que Clemente muere asesinado por Carlos Rodríguez Treviño, un empleado de Fama, en el cruzamiento de las calles de Colón y Cuauhtémoc, con quien sostuvo Clemente una discusión, y Rodríguez, al reconocerlo, se asustó y se defendió con un arma de fuego que disparó en dos ocasiones, matando al ex campeón mundial de box. Es una verdadera lástima que la displicencia eche a perder las virtudes del ser humano. Hoy recordamos el triunfo de Clemente Sánchez Xicoténcatl, un deportista regiomontano que llegó a lo más alto en su disciplina. Seguimos esperando el nacimiento de otro deportista estrella regiomontano que vuelva a poner en alto el nombre de nuestro país.