Internacional

Estados Unidos podría imponer pena de muerte a narcotraficantes

 

Washington - La Casa Blanca está barajando la posibilidad de imponer la pena de muerte a los criminales que trafican con drogas y con analgésicos opiáceos, responsables de un número creciente de muertes por sobredosis en Estados Unidos, indicaron este jueves (15.03.2018) la cadena CBS y el diario Político.

La propuesta sobre la pena capital se incluye en un paquete de medidas que está elaborando la Casa Blanca y que busca acabar con la epidemia de abuso de opiáceos que sufre el país.

Según CBS y Politico, que citan funcionarios de la Casa Blanca, el presidente, Donald Trump dará a conocer el plan el lunes durante un acto en Nuevo Hampshire, el tercer estado con la proporción por sobredosis de opiáceos más alta del país por detrás de Virginia Occidental y Ohio.

En un acto en la Casa Blanca a principios de mes, Trump sugirió que Estados Unidos podría seguir el ejemplo de otros países que imponen la pena de muerte a narcotraficantes.

El presidente también ha alabado en varias ocasiones el "increíble trabajo" del presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, cuya ofensiva gubernamental contra las drogas ha dejado 4.000 muertes en redadas policiales, aunque se estima que el número total de víctimas supera las 7.000.

Según los detalles filtrados a Político y CBS, el plan de la Casa Blanca incluye la posibilidad de que sean condenados a pena capital aquellos criminales que, de manera probada, cometieron actividades de tráfico de drogas que fueron "directamente responsables" de la muerte de alguien por sobredosis.

En concreto, la Casa Blanca habla de muertes por analgésicos opiáceos, que pueden obtenerse con receta o en el mercado negro, y también se refiere al fentanilo, un analgésico que suele destinarse al tratamiento del cáncer, aunque en los últimos años es usado por grupos criminales para aumentar la potencia de la heroína.

En los últimos seis años las muertes por sobredosis se han convertido en la causa más común de muerte violenta en Estados Unidos, por encima de los accidentes de tráfico o las armas.

Según datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), 64.000 personas murieron en 2016 por sobredosis de opiáceos (incluida la heroína) en Estados Unidos, lo que supone el fallecimiento de 175 estadounidenses al día y siete víctimas mortales cada hora.