19/Apr/2024
Nacional

No hay riesgos ni habrá crisis ante aranceles de EU: AMLO

 

Veracruz.- El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que no hay riegos ni se produciría una crisis de ningún tipo tras la amenaza del presidente Donald Trump de imponer aranceles de 5% a todos los productos provenientes de México a partir del 10 de junio hasta que detenga el problema migratorio.

  “No hay riesgos, no se produciría una crisis de ningún tipo, ni siquiera de caja”, sostuvo en su conferencia de prensa matutina desde este puerto veracruzano.

Además, anotó, “tenemos una hacienda pública fuerte, hemos recaudado bastante y hemos ahorrado. Tenemos suficientes reservas en dólares y pesos, tenemos una economía sólida y lo más importante es que contamos con el apoyo de los mexicanos”.

 Agregó que no ha tenido ninguna relación con presidentes o jefes de Estados, pero aseguró que México tiene siempre el apoyo de pueblos del mundo por su historia, por su política migratoria, además de contar con mucho prestigio y recobrado su lugar en el concierto internacional.

El Presidente aseguró que existe un ambiente favorable en el diálogo entre los gobiernos de México y Estados Unidos para resolver el tema de los aranceles a las exportaciones mexicanas, porque "es una situación que conviene a todos".

 Reiteró que a la par México hace su trabajo en todo lo relacionado con el fenómeno migratorio, sin desatender las causas que originan la problemática, aportando información objetiva y demostrable de las acciones de gobierno en esta materia.

 López Obrador pidió a los mexicanos tener confianza en que no va a haber ninguna afectación a la economía popular en caso de que se aplicaran esas medidas. “Nosotros ya tenemos un plan para garantizar que no se afecte más al pueblo. Sigue en pie el compromiso de mejorar la vida y el trabajo de los mexicanos”, acotó.

  “Aceptando -sin conceder que se aplicaran las medidas- vamos a convertir a México en una potencia de dimensión social para que no haya incertidumbre. México es un país con muchas riquezas y cuenta ahora con un buen gobierno”, afirmó.

 

Descarta participar en cumbre

 

Tras subrayar que existe disposición al diálogo por parte del gobierno estadunidense, el Ejecutivo federal descartó su participación directa en las negociaciones en ese país, porque México tiene una muy buena la comisión, con expertos que ya han trabajado y se conocen con sus contrapartes norteamericanas.

 En la sede del Museo Naval, dijo que lo importante es que primero se atendió la petición de dialogar y no dar “largas” al encuentro, que no se pudo hacer antes del miércoles porque los funcionarios estadounidenses están en misiones en otras partes del mundo.

 Sobre la delegación de México que viajó a Washington y que encabeza el canciller Marcelo Ebrard, López Obrador detalló que está integrada por la secretaria de Economía, Graciela Márquez; el subsecretario para América del Norte, Jesús Seade; el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, y la embajadora de México en Estados Unidos, Martha Bárcenas.

 Descartó que tras el diferendo con el vecino país del norte surja algún problema de ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC); “estoy seguro, se va a ratificar”, dijo.

 Enfatizó que aplicará una política prudente y sensata con Estados Unidos “y aunque tengamos el corazón caliente, vamos a tener la cabeza fría. La política también es equilibro entre la pasión y la razón”.

 

México hace lo que le toca en migración

 

Aseguró que aunque México hace lo que le corresponde, falta de información para que se tenga en cuenta la magnitud del fenómeno migratorio, dado que la mitad de los migrantes son hondureños.

 Indicó que es mediante programas de desarrollo para que haya empleo y bienestar como se podrá atender esa problemática, por lo que se pronunció porque se aplique de inmediato un plan de desarrollo en Centroamérica y se abran fuentes de trabajo en Honduras, El Salvador y Guatemala.

 Consideró que se deben impulsar programas de desarrollo en los países centroamericanos para arraigar a los pueblos a sus comunidades, "para que no se vean obligados a emigrar. Es la salida de fondo”.

 A pregunta expresa, reconoció que hubo una depreciación del peso frente al dólar, luego del diferendo con Estados Unidos, pero que la moneda mexicana resistió aunque el billete verde no llegó a como estaba antes, "cuando llegamos al gobierno".