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Responde Putin a maniobras de la OTAN verificando capacidad de fuerza aérea rusa

El presidente ruso, Vladimir Putin, ordena una inspección súbita de las Fuerzas Aéreas rusas, en un intento por evaluar su preparación en 'tiempos de guerra'.

Así­ lo ha anunciado este martes el ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu, quien ha declarado: "Durante la inspección se debe prestar especial atención a las unidades en alerta permanente, al despliegue de sistemas de defensa aérea en tiempos de guerra y a la preparación de los grupos de la aviación para repeler una agresión", según la agencia rusa de noticias TASS.

De igual modo ha enfatizado la necesidad de que, a lo largo de la inspección, se garantice el cumplimiento de los requisitos de seguridad de las armas y municiones, la ausencia de daños a la propiedad pública y de los impactos negativos sobre el medioambiente.

Durante la inspección se debe prestar especial atención a las unidades en alerta permanente, al despliegue de sistemas de defensa aérea en tiempos de guerra y a la preparación de los grupos de la aviación para repeler una agresión", declara el ministro ruso de Defensa, Serguei Shoigu.

Además, ha ordenado llevar a cabo "pruebas tácticas y ejercicios de control" en las unidades militares que se someterán a la inspección, con el objetivo de mejorar su interacción.

La orden del presidente de Rusia se produce en el marco de los actos del paí­s euroasiático para aumentar sus capacidades militares, pues lo ve necesario en medio de los tensos momentos que viven sus relaciones con los paí­ses miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), por las divergencias que mantienen.

El Presidente ruso describe a las fuerzas militares de su paí­s como un "argumento de peso" que responderá a cualquier intento provocativo de enemigos.

Las mencionadas tensiones entre ambos lados se han producido, concretamente, por el expansionismo de la OTAN cerca de las fronteras occidentales rusas, so pretexto de que Moscú desempeña un supuesto papel en los casos de la anexión de Crimea a la Federación Rusa en 2014 y de la crisis de Ucrania.

Denunciando el refuerzo de las tropas de la OTAN, Rusia tacha la expansión de la Alianza Atlántica de una "amenaza" para su seguridad nacional y un factor desestabilizador en la región. Es de mencionar que entre las medidas de Rusia para hacer frente a la OTAN figura el reforzamiento de su capacidad nuclear.