Woody Allen ha llegado a un acuerdo con Amazon Studios para poner fin a una demanda que presentó el pasado febrero contra la empresa por incumplimiento de contrato.

El actor, realizador y guionista acudió al tribunal federal para el sur de Manhattan en Nueva York, para pedir 68 millones de dólares, porque en 2018 la empresa había detenido el lanzamiento de su último trabajo, Día de lluvia en Nueva York. Además, anuló los otros tres proyectos ya firmados con el realizador, porque tras el estallido del movimiento #MeToo, volvieron a primera plana de actualidad las acusaciones contra el neoyorquino por haber abusado presuntamente de su hija Dylan, en 1992.

Los términos del acuerdo no se han hecho públicos, pero algunas fuentes cercanas afirman que "no ha habido ganadores". Se interpreta que Amazon no ha pagado todo lo que pedía Woody Allen, pero el pacto tampoco le ha salido barato. El abogado del cineasta argumentaba en el texto legal que el estudio estaba al tanto de las acusaciones, ya que tenían años de antiguedad. Por ahora no se estrenará el citado film en Estados Unidos. Allen acaba de rodar Rifkin's Festival en España, cuyo estreno está previsto para 2020.