Junio 24 de 1526: Se lleva a cabo la primera corrida de toros en Ciudad de México y en toda la Nueva España. Era el Día de San Juan Bautista, aunque existen varias versiones del trascendental evento de tauromaquia, pues algunos autores hablan del 13 de agosto de 1529 -tres años después- cuando hubo la primera fiesta brava. En “Historia y Tauromaquia Mexicanas”, el autor José de Jesús Núñez y Domínguez, afirma que es en esta fecha de San Juan Bautista, referenciando a Ricardo Pérez en su “Efemérides nacionales o narraciones anecdóticas de los asuntos más culminantes de la historia de México”, publicado en 1904, cuando sucedió este evento histórico. 

Otra fuente respetable que coincide con Núñez, es el cronista y soldado Bernal Díaz del Castillo, quien dice en su crónica del Día de San Juan Bautista, que “la ciudad entera ardía en festejos de todo linaje”. 

Las corridas de toros eran muy importantes en el siglo XVI, porque no había más diversiones públicas de aceptación popular que permitieran pasar los momentos de ocio en plan familiar. 

La tauromaquia tuvo en México un desarrollo impresionante, pues la afición se multiplicó y las grandes figuras de este arte le dieron a nuestro país, grandes satisfacciones.