Con un llamado desde Santa Martha Acatitla, Rosario Robles invitó a sumarse a las acciones de la Resistencia Civil Pacífica que inicia hoy su familia y en la que se exige su libertad tras vivir un proceso lleno de atropellos. 

“Les saluda Rosario Robles desde Santa Martha Acatitla, donde he sido privada injustamente de mi libertad, así como están muchas otras mujeres en este lugar, condenadas a morir lentamente, a perderse la oportunidad de salir adelante”, se le oye decir en un video compartido en sus redes sociales. 

La jornada, que arranca este domingo con una cadena de oración o meditación a favor de Rosario Robles y mujeres encarceladas injustamente; por un México a favor de la justicia y la democracia; por un Estado de Derecho y la unidad y reconciliación de los mexicanos. 

En los actos, en los cuales participará su hija Mariana Moguel, amigos de la exfuncionaria y demás personajes, se pide alzar la voz y fortalecer la postura del ministro Arturo Zaldívar acerca de que se abusa de la prisión preventiva y de que las cárceles están llenas de gente que no tienen recursos ni posibilidades de defenderse. 

“México necesita reconciliación, México necesita paz. Somos las mujeres las que lo podemos cuidar, lo podemos levantar. Les llamo de manera particular para que exijamos que se haga justicia, porque #SiesVenganzaNoesJusticia, porque si se utilizan las instituciones para venganzas personales entonces no es justicia. Vayamos juntos a la Jornada por la Resistencia Civil Pacífica a favor de la justicia”, añaden. 

La jornada, que inicia hoy y terminará el 15 de diciembre, tiene entre la lista de acciones el hacer recorridos por embajadas, asistir a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y a la Fiscalía General de la República (FGR); así como concentraciones en la Glorieta de la Palma y una movilización de 36 horas en el Zócalo a finales de noviembre y un ayuno de 10 días.

Robles, de 65 años, permanece en el penal de Santa Martha Acatitla desde el 13 de agosto de 2019. 

Su detención en 2019 fue vista como un paso en la cruzada contra la corrupción que dice encabezar el gobierno del presidente izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien fue elegido en 2018 en parte por el hartazgo de los mexicanos ante el saqueo de recursos públicos.

No obstante, su proceso ha estado plagado de irregularidades y venganzas políticas por parte de jueces, además de que en el caso de la Estafa Maestra es la única que se encuentra presa sin que aún se le compruebe nada y pese a que el delito por el que se le acusa no amerita prisión preventiva.