Seúl - Corea del Sur está tratando de acabar oficialmente sus relaciones hostiles con Corea del Norte antes de final de año para establecer una paz permanente que sería irreversible, dijo el presidente surcoreano, Moon Jae-in, en una entrevista publicada este viernes.
"La meta más básica de nuestra política es que nunca debe haber otra guerra en la península coreana", dijo el presidente en una entrevista con el diario indonesio Kompas.
La inusual entrevista tuvo lugar antes de una visita de tres días del presidente de Indonesia, Joko Widodo, a Seúl. Moon y Widodo se reunirán el próximo lunes, un día después de que el líder indonesio llegue para una visita de Estado.
Moon apuntó que el presidente del Comité de Asuntos de Estado norcoreano, Kim Jong-un, ya ha acordado desnuclearizar la península coreana y establecer la paz permanente.
El tema es implementar de manera sincera el acuerdo alcanzado por los líderes, y el plan es lograr suficiente progreso para final del año para que el proceso no sea revocado, dijo el presidente surcoreano según un guión de su entrevista escrita desvelado por su oficina, Cheong Wa Dae.
Los comentarios de Moon llegan a medida que está previsto que se celebre su tercera cumbre bilateral con el líder norcoreano en Pyongyang del 18 al 20 de septiembre. Moon y Kim se reunieron previamente en la aldea fronteriza de Panmunjon el 27 de abril y 26 de mayo.
El presidente expresó esperanzas para un fin oficial a la Guerra de Corea (1950-53) antes del final del año.
Como manera práctica de crear confianza, sería fantástico si una declaración de la guerra que supusiera el fin de las relaciones hostiles sobre la península coreana pudiera ser concretada este año, dijo Moon.
Las dos Coreas están técnicamente en guerra, ya que la Guerra de Corea acabó con un armisticio y no con un tratado de paz.
Según el presidente, Corea del Sur, siendo un país directamente involucrado en temas sobre la península coreana, tomará todos los pasos necesarios no solo para el desarrollo de la relación Sur-Norte sino también para el desarrollo de la relación Corea del Norte-EE. UU. y la aceleración del proceso de desnuclearización.
