Según Paco, El Polaco, el gran problema del agua en el Monterrey metropolitano de nuestros días, forma parte del negativo y magno proceso de corrupciones, en todos los niveles, sectores público y privado, en los que ha venido desenvolviéndose la vida de México, en los últimos cuatro decenios.

 Y como siempre, “la hebra se rompe por lo más delgado”, es el pueblo raso el sufriente de las ambiciones de poder, triquiñuelas, dinero, trampas y muchos trucos para ganar riquezas a costa de lo que sea.

 Ante tal situación, quienes “hacen números alegres”, señalan consumos negativos y peligrosos que ponen en riesgo los procesos productivos, educativos, administrativos, etc., del desarrollo de la gran comunidad regia y convierten a la gran ciudad metropolitana casi en un desierto, con agua racionada para trastocar cruel y despiadadamente la vida de los de abajo, y dejándolos “trinando” de impotencia y coraje.

 Pero, ya se anunció la construcción de un nuevo acueducto -El Cuchillo-Monterrey- con inversiones multimillonarias ¡doce mil millones de pesos!, suma a gastar para beneficio de los constructores y de quienes se mueven y administran el agua.

 En opinión de El Polaco, debiese prohibirse la venta del agua embotellada. Desde hace muchos años ya, está en los refris de las “tiendas de conveniencia” como cualquier soda y a precios altísimos.

 Luego, “Dar de beber al sediento”, una de las obras de Misericordia, enseñanza de nuestras abuelas…¿ya se convirtió en el gran negocio…? …Parece que así está sucediendo en el México y el Monterrey de nuestros días…!!!