25/Apr/2024
Editoriales

¿Después de la pandemia hiperinflación y estancamiento en el mundo?

Las inyecciones de dinero por la pandemia no fluyen hacia la economía sino a la especulación 

 

Como bien lo apunta hoy el columnista de El Financiero, Ernesto O´ Farril, desde cuando menos el 2009 la Reserva Federal de EU le inyecta mensualmente unos 160 mil mdd al sistema financiero lo cual suma, en este momento, unos 14 billones de dólares. El gobierno del Donald Trump le inyectó -- vía los “alivios” ante la pandemia-- otros 2 billones de dólares y ahora Joe Biden se propone inyectar los 1.9 billones que ya se aprobaron como “ayuda” frente a la pandemia, y otros 2.2 billones dizque “infraestructura”.   Según un reporte del FMI de este 29 de marzo, esas inyecciones de dinero --o “apalancamientos” o “boom crediticio” o de “políticas monetarias lacsas” , según  los términos “críticos” del FMI--, si bien sirvieron para “evitar una depresión económica global”  conducirán, dentro de unos 2 años,  a un “ajuste” que puede frenar la economía y provocar una nueva crisis. Por supuesto, el FMI está preocupado porque sabe que todas esas deudas contraídas por los gobiernos de EU y otros muchos países del mundo, no se podrán pagar y eso provocará un desplome de la totalidad del sistema financiero global, no sólo el de EU.  El FMI que no sabe qué hacer, propone solamente “políticas macro prudenciales”; como revisar bien a quién se le presta;  o que los bancos tengan mayor nivel de capitalización en relación a lo que prestan, etc., pero, eso sí “sin dejar de relajar” el flujo de préstamos para evitar “una caída del crecimiento”. En realidad, ni las inyecciones de dinero de los últimos 11 años, ni las del último año de pandemia aseguran ningún crecimiento,  sólo si acaso una reactivación de lo que paró  o cerró en los 12 meses de pandemia.  Por ejemplo, según el departamento del trabajo de EU, se recuperaron más de 900 mil empleos en marzo dentro de los EU, pero todavía faltan 8 millones más para recuperar lo perdido en este tiempo.  Además, de los 620 mil mdd que el plan de “infraestructura” de Biden contempla, la mayor parte va dirigido a hacer “más verde al sector energético”, como lo define El Economista, es decir, forzar una redirección de las inversiones en petrolero, gas o carbón, hacia “energías renovables” causando, como ya se vio un Texas una caída en la generación de energía, en el empleo etc.   Hay dos fenómenos que “reprimen el crecimiento” en EU, uno de ellos, según un reporte de The Manhattan Institute publicado en The Washington Post hoy,  es la “preferencia de Wall Street” y en el sector financiero en general “sobre la ganancia rápida v.s. la de largo plazo”.  Eso ha hecho que, por ejemplo, la empresa Cisco, dedicó este año 101 mil mdd “al pago de dividendos a los accionistas” y compra de sus propias acciones, y sólo 15, mil mdp a “formación de capital” como nuevas maquinarias, propiedad intelectual, edificios etc.,   mientras que en los años 70s, las proporciones eran al revés.  Esta “tendencia” ha hecho que la transferencia de recursos de la economía real al mundo financiero creció de 1.2% a un 4.0% del PIB.  De hecho, la mayor parte de los 2 billones que canalizó el gobierno de Trump a empresas y negocios por la pandemia, fueron a parar al fondo de inversiones BlackRock  y éste los dedicó a operaciones especulativas o a sus empresas socias.  Por otro lado, los recursos entregados a las familias de EU como son los 600 del  mes de enero y los 1400 de marzo como “ayuda” por la pandemia, la mayoría fueron a parar en pagos de deudas atrasadas como son renta, deudas en electricidad, telefonía, internet etc.  Sucede que el endeudamiento o “apalancamiento” como le llama el FMI, de las familias y empresas no financieras pasó de ser el 138% al 152% del PIB de 2010 a 2019, y la parte de las familias era el 60% del PIB.  Dentro de las empresas, cuya deuda aumentó un 11% del PIB durante un año de pandemia, existe una categoría llamada los  “eroder” según el Instituto Manhattan que son como Cisco, y dedican más recursos al pago de los accionistas que a su crecimiento. Existen también otra categoría, que son los “growers”, que han logrado crecer pero endeudándose más allá de sus capacidades de pago. Esas dos categorías abarcan a la mayor parte de las empresas de EU, las otras, las que pueden pagar a sus accionistas y también crecer, sólo se da en casos como Facebook, Apple etc., las llamadas “mega tech” del Valle del Silicón. Así que con una economía tan “apalancada” y las familias tan endeudadas, es posible esperar un estallido puesto ya que, también,  en este año, 120 países tienen que pagar 1.3 billones de dólares en deuda y 70 de ellos simplemente no podrán pagar pues ya enfrentan desempleo masivo, hambre y la pandemia.  A eso le teme el FMI, una crisis de pagos generalizada sin poder culpar a ningún villano comunista sino a sus propias políticas.  Así que podemos tener una crisis de hiperinflación con estancamiento o depresión.  La llamada “estanflación”, pero no sólo en México como afirma la revista Expansión, sino en buena parte del mundo. Sólo re direccionando los volúmenes de crédito hacia grandes obras de infraestructura, proyectos energéticos de alta densidad como los nucleares y ferrocarriles de alta velocidad que dinamicen la economía, se podrá solventar esta crisis que si, en verdad este frente a nosotros y quizá menos que en dos años.