20/Apr/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Marzo 8 de 1910: Día Internacional de la Mujer. En Copenhague, Dinamarca, asistieron 17 delegaciones de sendos países a una jornada de reflexión sobre la mujer y sus asuntos laborales. La primera decisión fue hacer una declaratoria en contra de la guerra y la segunda fue la celebración anual del Día de la Mujer. La activista de izquierda Clara Zetkin llevó la voz cantante en la toma de decisiones debido a que ella tenía una amplia trayectoria de luchas sociales pro feministas y su empeño por la realización de la reunión era evidente pues su convocatoria permitió la representatividad mencionada.

Este movimiento fue llevado de peldaño en peldaño hasta llegar al reconocimiento total desde el punto de vista político, laboral, y social a la mujer como un ser igualitario con el hombre. Desde luego que hablamos de la parte occidental del mundo, pues en los países árabes aún existen graves violaciones al derecho natural de la mujer como ser igualitario con el hombre. Sin embargo, ya para 1926 esta celebración del Día de la Mujer había llegado a México, y el presidente Plutarco Elías Calles convocó en el Palacio de Bellas Artes a un acto con ese fin. Al principio, esta fecha no decía nada para la gran mayoría de los mexicanos que, pensando sólo en su progenitora, sentían que, con la celebración del diez de mayo, estaba cubierto el tema. Poco a poco se hizo conciencia de la necesidad de convertir en realidad los principios de igualdad entrambos sexos en todos los órdenes. Hoy día, la ley electoral de México obliga a los partidos políticos a postular candidaturas en igual número a hombres y mujeres, algo que en pocas naciones del mundo se ha alcanzado. Sin embargo, de un tiempo a la fecha se han incrementado en forma geométrica los abusos y crímenes en contra de mujeres mexicanas. El número de feminicidios tiene azorados a propios y extraños, por lo que hace poco menos de un año inició un movimiento feminista con acciones contundentes, como son una marcha de protesta nacional por la violencia para hoy, y mañana 9 de marzo de 2020 habrá un histórico paro nacional convocado por el colectivo “Las Brujas del Mar” con el lema: “El nueve, ninguna se mueve”. No habíamos visto en México un movimiento de este tamaño, tan moderno, con su hashtag: #UnDíaSinMujeres, y con apoyos por todas partes. En cuanto al gobierno, considero que manejó equivocadamente el tema, pues el Presidente de la República no debió descalificar este gigantesco movimiento tildándolo de ser organizado por “conservadores que ya no pueden robar”. Su popularidad sufrirá una caída y el país perderá muchísimo dinero porque hasta instituciones bancarias cerrarán sus puertas durante ese paro.