Monterrey,.- El reflujo gastroesofágico (ERGE), enfermedad derivada del retorno anormal y sintomático del contenido gástrico hacia el esófago, aqueja a unos 500 mil pacientes en el estado, reveló Genaro Vázquez Elizondo, presidente de la Sociedad de Gastroenterología de Nuevo León (SGNL).
En conferencia de prensa, previa al XXV Congreso Internacional de Gastroenterología de la SGNL, el también integrante del Sistema Nacional de Investigadores, habló de esta afección, cuyos síntomas clásicos son el ardor (pirosis) y la regurgitación (sensación de retorno hacia arriba).
También dijo que la enfermedad puede impactar hasta a un 20 por ciento de la población occidental y en México puede alcanzar a un 14 por ciento la prevalencia.
“¿Qué significa esto?, que tenemos en Nuevo León entre 500 mil y 600 mil pacientes que tienen al menos síntomas, una vez por semana”, expuso.
Agregó que hay otros síntomas del reflujo gastroesofágico, los cuales están estrechamente asociados, como son el dolor torácico no cardíaco, tos, disfagia (deglución con dificultad), odinofagia (dolor al pasar sensación de globo) y náusea, entre otros, cuyas complicaciones están contenidas en la definición del Consenso de Montreal publicado en 2006.
Además el especialista explicó que entre las principales causas de la enfermedad se encuentran la irritación del recubrimiento interno del esófago debido a la exposición de ácido y de contenido alimentario, la apertura prolongada de la válvula que protege contra el reflujo y que limita el esófago del estómago (esfínter esofágico inferior).
De igual manera, cambios en la anatomía del mismo como la presencia de una hernia hiatal, y alteraciones en el movimiento del estómago y/o el esófago.
“De acuerdo con tres estudios publicados en nuestro país en los años 2007, 2009 y 2012, se calculó una prevalencia de ERGE de 14 por ciento en la población mexicana, considerando la presencia de síntomas problemáticos de reflujo por lo menos una vez a la semana.
“En el último censo en nuestro estado en el 2015 se calculó una población de aproximadamente cinco millones de personas, la prevalencia antes descrita muestra que existen aproximadamente medio millón de pacientes con síntomas al menos una vez por semana”, aseguró Vázquez Elizondo.
El tratamiento actual para ERGE incluye cambios en el estilo de vida como son la restricción dietética selectiva de alimentos, dejar de fumar, bajar de peso, elevar la cama, cenar temprano, entre otras.
Lo anterior, con el debido tratamiento médico, cuyo estándar de oro son los inhibidores de la bomba de protones (IBP’s); en algunos casos seleccionados, pueden además ofrecerse tratamientos tanto endoscópicos como quirúrgicos.
Dentro de los alimentos ácidos o irritativos mencionó los cítricos, tomate, cebolla, bebidas carbonatadas y los condimentados o picantes; dentro de los “reflujogénicos” están los alimentos grasos, café, té o bebidas con cafeína, chocolate y menta.
No obstante, en muchas ocasiones llegan un número importante de pacientes “refractarios”, es decir, aquellos que no están satisfechos con su terapia actual principalmente por un inadecuado alivio de los síntomas, señaló el médico cirujano por el Tecnológico de Monterrey.
“Esta cifra es alta y se calcula que tres de cada 10 pacientes están insatisfechos con su tratamiento para la ERGE”, dijo.
Sobre el tema, César García, gerente de marca de Laboratorios Chinoin, anunció que en un lapso de dos meses la empresa mexicana lanzará un nuevo inhibidor de la bomba de protones al mercado en este año que revolucionará el tratamiento de la ERGE y mejorará la calidad de vida de los pacientes en México.
El Congreso Internacional de Gastroenterología, programado del 23 al 25 de agosto en Monterrey, está dirigido a todos los profesionales de la salud y se abordarán temas de gran relevancia en todas las áreas del tracto digestivo, con la asistencia de 500 profesionales de la salud, 36 profesores locales, nacionales e internacionales.
