LONDRES — Las autoridades británicas han anunciado planes para una reforma de la estrategia antiterrorista en medio de informes de que decenas de condenados por terrorismo recuperarán la libertad este año.

Como parte del programa, los servicios de seguridad interior podrán suministrar información sobre sospechosos con otras agencias de gobierno, autoridades locales y empresas.

El secretario del Interior, Sajid Javid, dijo el lunes en su primer discurso importante que una de las lecciones de los ataques extremistas perpetrados en el Reino Unido en 2017 es que se debe transmitir la información confidencial a las autoridades locales para privar a los milicianos de un “lugar seguro” donde operar.

Dijo que la amenaza de ataques extremistas sigue siendo extremadamente alta a pesar del derrumbe del “califato” declarado por el grupo Estado Islámico.

Javid dijo que la amenaza de ataques extremistas de la derecha también ha aumentado. El Estado Islámico y la ultraderecha tienen más elementos en común de lo que reconocen, dijo.

“Ambos explotan los reclamos, distorsionan la verdad y socavan los valores que nos mantienen unidos”, dijo.

Añadió que es necesario actualizar las leyes británicas de acuerdo con el avance de la tecnología, por ejemplo las que prohíben descargar videos que alientan el terrorismo pero no transmitirlos en vivo.

El ministro de Seguridad, Ben Wallace, dijo a la BBC que la nueva estrategia antiterrorista tratará de convencer a los individuos que se “aparten” de la ideología extremista, y se concentrará en supervisar a los que cumplan sus condenas por terrorismo cuando salgan de la cárcel.

El diario británico Guardian informó que más de 80 de las 193 condenas relacionadas con el terrorismo dictadas entre 2007 y 2016 terminan este año. El número de liberados podría ser mucho mayor porque los presos pueden salir en libertad condicional al cumplir la mitad de sus condenas.