Mayo 28 de 1928: Muere en la Ciudad de México el general revolucionario y exgobernador Porfirio G. González. Nacido en China NL el 10 de agosto de 1885, en el seno de una familia formada por Máximo González y Dolores González, dedicados a la agricultura y a la ganadería. A los 18 años de edad se incorporó a la Revolución Constitucionalista alas órdenes de Lucio Blanco. Por su buena participación en combate se le nombró Coronel y en 1914 se sumó aÁlvaro Obregón, bajo las órdenes de Cesáreo Castro, con quien hizo campaña enVeracruz y Puebla. En 1915 ya ostentaba el rango de General de Brigada. Sin embargo, era de carácter altivo, por lo que hubo de enfrentar dos juicios militares. El primero en 1917 –declarado inocente cuatro años después- por abuso de autoridad; y otro en 1919 por pillaje, acusación que le llevó a purgar una pena de seis meses en la cárcel de Tlatelolco. 

Al salir encontró el ambiente político nacional revuelto. El proceso electoral se le había complicado a Carranza por intentar la imposición de Ignacio Bonillas, embajador en Washington, pues Álvaro Obregón, De la Huerta, Calles, y otros militares sonorenses proclamaron el 29 de abril de 1920, el Plan de Agua Prieta en su contra. En él se desconocía como Presidente a Carranza, quien, ante la presión de los insurrectos, salió de la capital del país para refugiarse en Veracruz, pero en el camino, - Tlaxcaltongo, Puebla- fue asesinado.

El plan de Agua Prieta desconocía también a los gobernadores de Guanajuato, San Luis Potosí, Nuevo León y Tamaulipas, mismos que serían sustituidos por quienes nombrara el jefe supremo del Ejército Constitucionalista, Adolfo de la huerta, parte del Grupo Sonora. De la Huerta asumió la Presidencia de la República y convocó a elecciones, mismas que ganó Álvaro Obregón gobernando de diciembre de 1920 a noviembre de 1924.

Esto se reflejó localmente pues gobernaba -de 1917 a 1919-, el carrancista Nicéforo Zambrano, que fue sustituido el 4 de octubre de 1919 por otro carrancista, José E. Santos. Empero, ya con el plan de Agua Prieta, el 10 de mayo de 1920, Santos dejó en el poder a Humberto Barros, que duró sólo tres días (del 10 de mayo al 12 de mayo), quedando a cargo Félix G. Lozano, quien gobernaría otros dos días (12 y 13 de mayo) pues el 13 de mayo de 1920 arribó a nuestra ciudad el general Félix Lozano con cien hombres, en una jugada paralela a la nacional que De la Huerta fue presidente interino para convocar a elecciones. El Plan de Agua Prieta desconocía a varios gobernadores, entre ellos al de Nuevo León, y el Senado de la república nombró gobernador a Porfirio G. González.

De inmediato convocó a elecciones municipales, y el lampacense Pablo González –leal a Carranza- intentó un levantamiento siendo detenido, sometido a consejo de guerra en Monterrey, y condenado a muerte, pero De la Huerta lo indultó a cambio de que saliera del país. Porfirio G. González convocó a eleccciones de gobernador que ganó Juan M. García quien era anti obregonista y aún así le respetó el triunfo. García fue destituido después y sustituido por el médico Ramiro Tamez, quien convocó a elecciones en junio de 1923 compitiendo Aarón Sáenz, Alfredo Pérez y desde luego, Porfirio G. González. Los resultados electorales fueron un desastre y como producto, terminó Nuevo León con dos Gobernadores y dos Congresos del Estado. Uno de los dos gobernadores era Porfirio González y el otro Alfredo Pérez. La decisión judicial fue nombrar provisional a un tercero llamado Anastacio Treviño. Se repitió el proceso y ganó Porfirio G. González, quien gobernó con prudencia reinstalando la paz en el Estado. Sin embargo, la política del presidente Calles molestó a los empresarios nuevoleoneses y le rebotó esa inconformidad a González. Luego de grandes movimientos de carácter nacional confrontaciones con la Iglesia y negociaciones con la Iniciativa Privada, cayó de la gubernatura Porfirio G. González, siendo sustituido por Jerónimo Siller, un empresario que redujo la presión con los grupos conflictuados.