Editoriales

Muerte en su invento

Hace una década aproximadamente, se han popularizado en países de los llamados desarrollados, el uso de los vehículos Segway, usados por vigilantes de centros comerciales, aeropuertos y sitios donde haya distancias largas qué cubrir.

Son eléctricos, de dos ruedas en paralelo, y el conductor va de pie. Inventados –o al menos patentados- por el empresario inglés Jimi Heselden (1948-2010), quien se hizo más famoso a partir de su muerte, pues ocurrió cuando transitaba en uno de sus aparatos. Resulta que el empresario detuvo su vehículo para dejar pasar por un angosto camino a un tipo que paseaba a varios perros sujetados por una cuerda o reata. Cuando quiso reanudar su marcha. Heselden reculó con su Segwey, sólo que calculó mal las distancias y se despeñó en un precipicio de 24 metros y cayó en las frías aguas del río Wharfe en el norte de Inglaterra y se ahogó.