El viejo chiste de que Monterrey tiene el mejor clima de todo México y al que no le guste, que regrese en dos horas, sigue siendo válido.

Porque de repente pasamos calores en diciembre, fríos en mayo, estiaje en septiembre, aguaceros en febrero, granizadas en abril, etcétera.

La realidad es que nadie puede asegurar que haya mal clima cuando llueve y hace frío, o buen clima cuando hay calor fuerte y sequía, pues para calificar la bondad del clima se debe saber en cuales condiciones atmosféricas nos suceden las cosas buenas, más que si nos agrada el frío o el calor (‘la calor’, decía mi adorada madre Gaby).    

Partamos de la pregunta básica: ¿Cuál fue la temperatura existente durante la creación de la vida? 

Esta pregunta se la hacen los científicos y para responderla, se han dedicado vidas enteras a la investigación. Porque es probable que la vida se haya formado en condiciones de frío o de calor extremos; diversos experimentos de laboratorio así lo han demostrado. Veamos.

En 1953, los norteamericanos Stanley Miller y Harold Urey pasaron una corriente eléctrica a través de una mezcla de compuestos para estimular relámpagos, condiciones que pudieran estar presentes en los orígenes de los mares y atmósfera de la Tierra. 

Se formaron diversas sustancias, y entre ellas estaban aminoácidos, que son la base de la proteína, es decir, la vida pudo crearse en esas condiciones de calor extremo. 

Posteriormente, en 1960, Leslie Orville, otro científico norteamericano, congeló una mezcla similar de sustancias químicas; y se creó un compuesto que forma parte del ADN y que sugiere que la vida pudo desarrollarse durante alguna de las glaciaciones ocurridas en la larga existencia de la Tierra. Esta es, obviamente, la alternativa de origen de la vida en el frío extremo. 

Esto lo leí hace algunos años, y desde entonces dejé de hacerle caso a las chicas guapas que anuncian el pronóstico del clima cuando dicen: para mañana tendremos buen clima, pues dejará de llover y el termómetro subirá (a menos que nos estén diciendo que subirán el aparato para medir temperaturas al segundo piso). 

O mañana se esperan malas condiciones porque hay 90 por ciento de probabilidades de lluvia, y bajará la temperatura.

¿Malo o bueno el clima para qué o para quién? ¿para los agricultores? ¿para los constructores? ¿para los comerciantes? ¿para el turismo? ¿para la cría de plagas? ¿para su gusto? Porque todos tenemos preferencias diversas.  

Por eso debemos cambiar nuestro viejo chiste para decir: Monterrey tiene el mejor clima de México, y punto.