CIUDAD DE MEXICO- Empresarios mexicanos se mostraron hoy preocupados por la nueva crisis fronteriza generada por la muerte de 53 migrantes en un contenedor de un camión en Texas, luego que el gobierno de ese estado anunció que realizará otra vez estrictas revisiones que afectan al comercio en la zona limítrofe.

Organismos empresariales solicitaron al gobernador de Texas, Greg Abbott, que ya había causado un gran bloqueo en el intercambio bilateral con Estados Unidos hace unos meses, al realizar estrictas verificaciones de vehículos de carga en la región, que evite frenar el tránsito de mercancías.

"Lo único que solicitamos al gobernador de Texas es que no entorpezca el tránsito de camiones hacia Estados Unidos. Ni le ayuda a él ni nos ayuda a nosotros la cantidad de horas que puede retrasar esto", afirmó José Abugaber, presidente de la confederación de Cámaras Industriales.

Esta medida "va a afectar la logística nacional y la internacional", señaló Abugaber, quien sugirió a Abbott en lugar de estas acciones poner en marcha "un plan estratégico de investigación" que incluya el uso de "tecnología" para evitar que entren migrantes ocultos en compartimientos ocultos de los vehículos.

El director general del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce), Fernando Ruiz, señaló que preocupa al sector exportador los costos y tiempos que provoquen las revisiones, pues "el gran volumen de mercancías que pasa por Texas puede "complicar" mucho las cosas.

Esta circunstancia puede reflejarse en "un incremento de costos y de tiempos" para los cruces de productos mexicanos hacia Estados Unidos", afirmó.

En abril pasado, cuando Abbott por primera vez lanzó su cruzada para impedir el paso de los migrantes, se generaron filas kilométricas de camiones en los cruces fronterizos que debieron esperar más de 24 horas para ingresar a Estados Unidos, y se produjeron pérdidas millonarias.

Abbott acusa al presidente Joe Biden de no hacer nada para impedir la actual avalancha de personas sin documentos procedentes sobre todo de Centroamérica, pero los analistas consideran que el gobernador republicano busca ganar simpatías entre su base para reelegirse en las elecciones de noviembre próximo.

El llamado "estado de la estrella solitaria" es la puerta de entrada de productos mexicanos hacia el mercado estadounidense y se estima que los productos que ingresan desde México por carretera representan alrededor del 35% por de las importaciones totales de Estados Unidos.

Texas es de hecho el principal socio comercial de México entre todos los estados norteamericanos, con un flujo comercial entre ambas partes de 442.000 millones de dólares.

La principal preocupación es que puedan estropearse productos perecederos, sobre todo hortalizas, como aguacates y tomates, a pesar de los sistemas de refrigeración de los vehículos, porque de sufrir averías podría romperse la "cadena de frío", lo que podría generar escasez de alimentos.

El ministerio de Relaciones Exteriores condenó en esa oportunidad la política de inspecciones más estrictas para camiones de carga que entran a Texas desde México, pero hasta ahora no se ha pronunciado sobre las nuevas revisiones. Refugio Muñoz, vicepresidente de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) manifestó su temor de que las medidas de Abbott hagan "más lento el flujo comercial".

"Las revisiones en la frontera siempre se han hecho y si se pretenden duplicar como sucedió en abril, se vería afectado el traslado de mercancías y se romperían las cadenas de suministro", indicó.

El especialista en temas de transporte de carga Miguel López estimó que podría elevarse los costos logísticos lo que repercutiría en los precios de las mercancías en momentos en que el país sufre una inflación de casi el 8% y de alrededor del 14% en alimentos.

Sin embargo, Ernesto Gaytán, presidente de la Asociación de Camioneros de Texas, confió en que "las revisiones serán distintas a las de abril pasado" y no afectarán el flujo comercial bilateral.