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Por la globalización débiles las naciones frente al coronavirus...Trump prepara a EU para producción militar de equipo

 

El miércoles 26 de febrero, en las horas previas al presidente Trump, en una conferencia de prensa sobre la preparación estadounidense para la amenaza de una pandemia de COVID-19, se reunieron funcionarios de Salud y Servicios Humanos y el Departamento de Seguridad Nacional para discutir la activación de la Ley de Producción de Defensa (DPA), para otorgar al Presidente poderes de emergencia para intervenir en el sector industrial para asegurar la producción de los elementos necesarios para hacer frente a la epidemia. La DPA, adoptada en 1950 durante la Guerra de Corea, le otorga al presidente una amplia autoridad para "acelerar y ampliar el suministro de recursos de la base industrial de los EE. UU. Para apoyar los programas militares, de energía, espaciales y de seguridad nacional", según la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias sitio web.

Si bien el uso de DPA se discutió principalmente para asegurar la producción de máscaras, dispositivos respiratorios, etc., claramente podría abordar prácticamente todo el espectro de capacidades e infraestructura de fabricación. Como un funcionario de la Casa Blanca le dijo a Reuters sobre el DPA, "básicamente le permite dirigir las cosas que deben hacerse".

La actual crisis biológica y económica global demuestra la verdad de la identificación de Lyndon LaRouche de capacidades industriales y agrícolas completas como la medida real de la seguridad estratégica y económica de la nación. Helga Zepp-LaRouche señaló en su declaración del 27 de febrero que la crisis de COVID-19 está desafiando "las cadenas de suministro para el sistema de producción industrial, en las cuales la soberanía de las economías nacionales ha sido reemplazada por carteles internacionales, creando dependencias extremas de esas cadenas de suministro."

El punto no es restaurar esas cadenas de suministro, sino poner fin al proceso de globalización que buscaba la explotación de mano de obra barata y ganancias rápidas estirando estas cadenas en todo el mundo, dejando a todas las naciones dependientes de esos carteles, incapaces de satisfacer las necesidades de su propia nación.

Jennifer Santos, subsecretaria adjunta de defensa de política industrial, señaló en un artículo publicado hoy en Defensa Nacional: “Desde el primer día de la administración Trump, la salud y la resistencia de la base industrial han estado a la vanguardia en la seguridad nacional conversación." El presidente Trump emitió una Orden Ejecutiva el 21 de julio de 2017, poco después de asumir el cargo, titulada "Evaluación y fortalecimiento de la base industrial de fabricación y defensa y la resistencia de la cadena de suministro de los EE. UU." La Sección 1 de ese documento, incluida a continuación, expresa su profundo entendimiento de que La seguridad estratégica y económica de la nación se vio profundamente socavada por el proceso de globalización, y la productividad de la nación y su fuerza laboral debe ser restaurada.

La emergencia que enfrenta la nación y el mundo de hoy requiere que el presidente invoque el DPA, evite el Congreso corrupto y comience el proceso de restauración del Sistema Americano y la productividad de la nación, en cooperación con las otras naciones importantes del mundo que realizan el mismo, como se pide en la declaración de Zepp-LaRouche.

Sección 1 de la Orden Ejecutiva Presidencial del 21 de julio de 2017 sobre Evaluación y fortalecimiento de la Base Industrial de Fabricación y Defensa y la Resiliencia de la Cadena de Suministro de los Estados Unidos:

Por la autoridad conferida en mí como presidente por la Constitución y las leyes de los Estados Unidos de América, se ordena lo siguiente:

Sección 1. Política. Una base industrial de fabricación y defensa saludable y cadenas de suministro resistentes son esenciales para la fortaleza económica y la seguridad nacional de los Estados Unidos. La capacidad de los Estados Unidos para mantener la preparación y aumentar en respuesta a una emergencia, se relaciona directamente con la capacidad, las capacidades y la resistencia de nuestra base industrial de fabricación y defensa y las cadenas de suministro. Sin embargo, las cadenas de suministro modernas a menudo son largas y la capacidad de los Estados Unidos para fabricar u obtener bienes críticos para la seguridad nacional podría verse obstaculizada por la incapacidad de obtener varios componentes esenciales, que pueden no estar directamente relacionados con la seguridad nacional. Por lo tanto, los Estados Unidos deben mantener una base industrial de fabricación y defensa y cadenas de suministro capaces de fabricar o suministrar esos artículos.

La pérdida de más de 60,000 fábricas estadounidenses, compañías clave y casi 5 millones de empleos de fabricación desde el año 2000 amenaza con socavar la capacidad y las capacidades de los fabricantes de los Estados Unidos para cumplir con los requisitos de defensa nacional y plantea preocupaciones sobre la salud de la base industrial de fabricación y defensa. La pérdida de compañías, fábricas o elementos adicionales de las cadenas de suministro podría afectar la capacidad interna para crear, mantener, proteger, expandir o restaurar capacidades esenciales para la seguridad nacional.

Como la capacidad de fabricación y la base industrial de defensa de los Estados Unidos se han debilitado por la pérdida de fábricas y empleos en la fabricación, también las habilidades de la fuerza laboral son importantes para la defensa nacional. Esto crea una necesidad de acción estratégica y rápida en la creación de programas y políticas de educación y desarrollo de la fuerza laboral que apoyen el crecimiento del empleo en la fabricación y la base industrial de defensa.

El apoyo estratégico para un sector manufacturero nacional dinámico, una base industrial de defensa dinámica y cadenas de suministro resistentes es, por lo tanto, una prioridad nacional importante. Una evaluación exhaustiva de la base industrial de defensa y las cadenas de suministro, con el aporte de múltiples departamentos ejecutivos y agencias (agencias), proporcionará una evaluación necesaria de nuestras fortalezas y debilidades actuales.