Una vez escuché a un hombre mayor diciéndole a un compañero mío de secundaria que no corriera porque estaba lloviendo, pues así se mojaría más.

 Nunca he investigado si hay algún estudio con bases científicas para determinar qué se debe hacer ante la situación de estar en medio de una lluvia.

 Desde luego que lo único que puede hacerse cuando llueve, es dejar que el agua caiga. Pero analicemos qué sucede durante una lluvia de intensidad media, pues si se trata de un chaparrón, hágase lo que se haga siempre nos quedaremos empapados en cuestión de segundos.

 Si vemos avanzar entre la lluvia ligera a un automóvil, observaremos que se moja primero la parte del cofre o delantera, y conforme se avanza más rápido se incrementa el agua que cae en el vidrio delantero obligando a usar los limpia brisas, mientras el vidrio de atrás permanece semi seco.

 Pero si se mueve el auto despacio, la lluvia moja de inmediato todo el auto.

Entonces lo dicho por el viejón de la Secundaria no era tan razonable, y en forma natural cuando llueve corremos para mojarnos menos tiempo es decir, que nos caiga menos agua.

 Sin embargo, entre más rápido corramos, más fuerte caerán las gotas en nuestra ropa, incrementándose la penetración del agua al cuerpo.

Desde luego que otro elemento importante en este caso de correr en la lluvia es el tipo de tela de nuestra ropa.

 Porque hay telas impermeables como el plástico, y también telas de lana o algodón que absorben más o menos el agua dependiendo de su textura, grosor y sobre todo, el tiempo de exposición a la lluvia, que en tiempos de frío, es muy dañina a la salud.

 Concluyo diciendo que el señor que recomendaba a mi compañero no correr bajo la lluvia porque más se mojaría, estaba equivocado, pues lo mejor para no mojarse cuando caminamos bajo la lluvia es abrir un paraguas.