Una vez guardé muy bien un artículo de una revista que trataba del combate a los temores. Lo guardé tan bien que no lo encuentro, y hablaba de no temerle al fracaso, pues el mayor es no intentar nada, y haciendo memoria, mis experiencias coinciden con ello. En mi vida he perdido oportunidades de negocios por pensar demasiado algunas ideas “para no fracasar”, pero en el ínterin alguien más las realiza.

Postulaba también que no debemos temer a lo que los demás digan de uno y ciertamente he aprendido que haga lo que haga siempre habrá quienes me critiquen, así que ya no me asusta saber que se habla mal de mi. También se refería al temor a la verdad. Y recuerdo que por buen tiempo yo evadía saber la verdad de algunas cosas por temor a desilusionarme, hasta que descubrí lo horrible que es la mentira, y desde entonces prefiero la realidad. Del temor al sufrimiento decía que se debe erradicar, y eso lo entendí recapitulando que, cuando era niño y me enfermaba, al aliviarme ya no me quedaba la ropa porque había crecido en el proceso; esto significa que el dolor nos hace crecer. El artículo que traigo perdido desde hace décadas es más amplio, trae otros conceptos muy buenos, pero estos que se me grabaron en la memoria, son excelentes.