CIUDAD DE MEXICO - Las peores lluvias en más de 40 años que castigan a tres estados de la franja más pobre de México, el sureste, Chiapas, Veracruz y Tabasco, arrojaron más de 500.000 personas sin techo, e inclusive desataron una controversia política.

Dos figuras políticas notables vinculadas al presidente Andrés López Obrador, intercambiaron acusaciones por la grave situación que enfrenta sobre todo Tabasco, en las costas del Golfo de México, donde más de 8.000 viviendas han sido dañadas en forma temporal o permanente.

El gobernador de Tabasco Adán López, acusó al director de la Comisión Federal de Electricidad, Manuel Bartlett, de actuar "con insensibilidad e irresponsabilidad" al abrir las compuertas de la represa Peñitas, ubicada en Chiapas, para inundar vastas zonas de su provincia, especialmente Villahermosa, la capital.

Entre las localidades afectadas por el agua proveniente del embalse figuran Nacajuca, Jalpa y Cunduacán, señaló el mandatario.

Sin embargo, en un comunicado oficial, el titular de la CFE, una de las más emblemáticas empresas gubernamentales, se defendió al señalar que es falso que la compañía haya inundado a Tabasco.

"Del 100% del agua fluvial que escurre hacia Villahermosa, el 73% no tiene control alguno y sólo el 27% proviene del sistema de presas del (río) Grijalva)", afirmó la CFE en un comunicado.

"El manejo de la creciente por la presa Peñitas, su descarga al río Mezcalapa, para después bifucarse hacia el río Samaria y el río Carrizal, no tienen relación con las inundaciones sostenidas en Villahermosa", agregó.

Laura Velázquez, coordinadora de Protección Civil del ministerio de Gobernación (interior), dijo que se prepara una primera evaluación para saber cuáles son los insumos o la ayuda humanitaria que necesita la población afectada.

Hasta el 31 de octubre, 8.035 viviendas habían resultado afectadas por penetración de agua, 7.835 en Tabasco, 185 en Veracruz y 15 en Chiapas.

Asimismo, hubo 18 bloqueos totales de rutas, 10 en Tabasco, 5 en Veracruz y 3 en Chiapas, así como dos puentes afectados en Tabasco.

"Tenemos números que alarman. Desde 1980 no llovía tanto en Tabasco", señaló Velázquez luego de un recorrido con el gobernador de Tabasco de las zonas afectadas.

Velázquez prometió que la ayuda del gobierno federal llegará pronto a las zonas más castigadas de los tres estados, una vez que cesen las lluvias.

Protección Civil ha alertado que los recientes fenómenos meteorológicos en el sureste seguirán generando desbordamientos de ríos, inundaciones, deslaves y flujos de lodo y escombros.

Para enfrentar la emergencia, fueron abiertos 14 refugios temporales, 12 en Tabasco, uno en Veracruz y uno más en Yucatán.

Sin embargo, el desplazamiento de personas a refugios temporales ha sido mínimo: sólo 325en Tabasco y 18 ven Veracruz, por cuanto la mayoría prefirieron resguardarse con familiares.

Las lluvias se agregaron a la secuela que dejó la tormenta tropical Gamma, en la cercana península de Yucatán, hace un mes.

El gobernador de Tabasco informó que la represa Peñitas se hallaba en un 95,8 % de su capacidad, pues en las últimas horas disminuyó en 32 centímetros.

Sin embargo, advirtió que la extracción tierra abajo, en la zona del estado, continuará en 1.550 metros cúbicos por segundo para regular los ingresos de agua, lo que hace prever que la situación siga siendo crítica.El ministerio de la Defensa Nacional puso en marcha un plan de apoyo en caso de desastre para apoyar a la población afectada, llevando a la gente atrapada en los techos de sus viviendas alimentos, brindando atención médica a los enfermos y colocando sacos con arena a las orillas de los ríos para contener el agua.

En la capital de Tabasco se cerró el malecón de la ciudad para evitar accidentes y se suspendieron las actividades escolares.

Las inundaciones no hicieron sino empeorar la crisis derivada de la pandemia de Covid-19 que ha golpeado duramente sobre todo a Tabasco.