Ucrania lanzó sus primeros ataques dentro del territorio ruso con misiles ATACMS de largo alcance de fabricación estadounidense, según el ministerio de Defensa de Rusia.
En Telegram, el ministerio de Defensa de Rusia posteó que el 19 de noviembre, a las 03:25, el «enemigo lanzó ataques con seis misiles balísticos dirigidos a una instalación en la región de Bryansk».
El ministerio agregó que según los datos confirmados, «se utilizaron misiles táctico-operativos ATACMS de fabricación estadounidense».
Misiles
El ministerio dijo que como resultado de una operación antimisiles, «los sistemas SAM S-400 y Pantsir derribaron cinco misiles y dañaron uno».
«Sus fragmentos impactaron en el territorio técnico de la instalación militar en la región de Briansk, provocando un incendio que fue rápidamente eliminado», según el ministerio.
Rusia dijo que no hubo víctimas ni daños.
Según Reuters, Kiev dijo el martes que había golpeado un arsenal ruso cerca de la ciudad de Karachev, en la región de Bryansk, a más de 110 kilómetros de Ucrania.
Ucrania no ha confirmado oficialmente qué arma se utilizó.
Según unos funcionarios estadounidenses anónimos que hablaron con medios de comunicación, el presidente Joe Biden había autorizado a Ucrania a utilizar misiles de largo alcance proporcionados por el Pentágono para atacar objetivos en la región rusa de Kursk.
Ucrania llevaba tiempo solicitando permiso para utilizar armas de largo alcance dentro de territorios rusos, pero Biden se había opuesto. Anteriormente, Biden dijo que consideraba que permitir el uso de misiles estadounidenses en territorios rusos podría arrastrar a Estados Unidos y a otros miembros de la OTAN a un conflicto directo con la Rusia nuclear.
El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió que si los aliados de la OTAN permiten que Ucrania ataque dentro del territorio ruso, se consideraría una implicación directa en la guerra, y que Moscú podría proporcionar armas de largo alcance a otros para atacar objetivos occidentales.
Armas nucleares
El 18 de noviembre, el Presidente de Rusia, Vladimir Putin, firmó una nueva doctrina que rebaja el umbral para el uso de armas nucleares, dijo su portavoz el lunes.
La doctrina establece ahora que un ataque contra Rusia por parte de cualquier nación que utilice misiles convencionales suministrados por una potencia nuclear se considerará un ataque conjunto.
El anuncio, realizado a través de la agencia de noticias Tass, se produjo tras la airada reacción del Kremlin a las informaciones de que el presidente Joe Biden había dado permiso a Ucrania para disparar misiles suministrados por Estados Unidos y la OTAN en el interior del territorio ruso.
La decisión de Putin de firmar la nueva doctrina se produjo exactamente 1000 días después de que enviara tropas a Ucrania el 24 de febrero de 2022.
Tercera Guerra Mundial.
El expresidente y primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, estrecho aliado de Putin, escribió en las redes sociales sobre el tema.
«La nueva doctrina nuclear de Rusia significa que los misiles de la OTAN disparados contra nuestro país podrían considerarse un ataque del bloque a Rusia. Rusia podría tomar represalias con armas de destrucción masiva contra Kiev y las instalaciones clave de la OTAN, dondequiera que se encuentren. Eso significa la Tercera Guerra Mundial», posteó Medvedev.
Sam Faddis, exoficial de la CIA y miembro sénior del Center for Security Policy, escribió en su Substack el 31 de octubre que «estamos bailando al borde del abismo».
«Putin está practicando para el fin del mundo. No asuman que él solo es un farol», añadió.
Tim Ripley, analista militar y editor del sitio web Defence Eye, declaró anteriormente a The Epoch Times que los dirigentes rusos solo utilizarían armas nucleares si estuvieran desesperados.