01/May/2025
Editoriales

Pedro Infante Cruz, un actor prolífico

El ídolo de México nació en Mazatlán, en el año de 1917. 

Empezó como cantante de orquestas en la Capital de Sinaloa y se mudó a la Capital del país, en donde se le abrieron las puertas grandes de la farándula.

Cantó para una estación de radio y se presentó en teatros populares, hasta que Discos Peerles le grabó sus primeros discos. 

Siendo un cantante conocido, el director cinematográfico Ismael Rodríguez le dio la oportunidad de filmar películas que terminaron siendo clásicas, como Cuando lloran los valientes y la trilogía de Pepe El Toro: Nosotros los Pobres; Ustedes los Ricos; y Pepe El Toro, en 1952.

Desde 1939 todo fue cosechar triunfos en la pantalla grande y en las presentaciones en vivo por todos los estados del país, así como en Sudamérica.

Por su talante simpático y buen porte, Pedro Infante fue un símbolo sexual para las mujeres mexicanas y muchas de ellas soñaban con estar en sus brazos

Por su parte, él tuvo dos pasiones fuera de su oficio de artista: la aviación y las mujeres.

De la primera alcanzó un número cercano a las 3 mil horas de vuelo, hasta que en un viaje que desde Mérida haría hasta la Ciudad de México, cayó en pleno centro de la Capital yucateca, y murió instantáneamente.

De su segunda pasión nació una gran cantidad de hijos, unos legítimos, otros ilegítimos y muchísimos inventados. 

Su primera hija se llamó Guadalupe Infante López, hija de su novia en Guamúchil, Guadalupe López. Luego se casó con María Luisa León, pero al no procrear hijos, adoptaron a Dora Luisa. Después se vinculó sentimentalmente con la bailarina Lupita Torrentera, procreando tres hijos: Graciela Margarita, Pedro, y Guadalupe Infante Torrentera.

Después conoció a la actriz yucateca Irma Dorantes -que tenía 16 años- y engendraron a Irma Infante.

Estos cinco son los hijos legales de Pedro Infante, pero desde 1939 que filmó su primera película hasta años después de su muerte, según la Revista Teleguía eran, hasta el año de 1988, mil 156 hijos apócrifos.

Pedro Infante tuvo varias novias en Monterrey, y construyó grandes amistades, como con Lalo González ‘Piporro’, a quien apoyó en su carrera; María Eugenia Llamas ‘La Tucita’, y muchos más.