Levanta el vuelo Roberto Gadea, legendario jugador de los Tigres de la UANL. Formaba parte del equipo que le dio el primer Campeonato de Liga 1977-1978 dirigidos por Don Carlos Miloc. Nacido en Montevideo, Uruguay el 2 de febrero de 1953, se inició en 1970 jugando para el equipo Defensor de su País y que llegara a México en 1975 cuando el equipo luchaba por no descender a la Segunda División, bajo la dirigencia de Don Ramón Cárdenas y Don Rogelio Cantú.

 De carácter noble y afable, se supo ganar el corazón de la afición durante su carrera de futbolista, retirándose a los 28 años con el equipo Atlas de Guadalajara en 1980. Para él, no aplicó la frase de un jugador “Mi vida va a terminar, el día que ya no pueda jugar al fútbol”.

 Fue el Ing. Cayetano Garza quien en 1982, lo invitó a formar parte como entrenador de fútbol del equipo representativo de la UANL donde inició su carrera como formador de talentos y maestro en la Facultad de Organización Deportiva. Me tocó conocerlo y tratarlo a partir de la temporada 77-78 en que el equipo Tigres fuera Campeón y Roberto alineara en el partido final por el Campeonato.

 Aún lo recuerdo en mis visitas a la Ciudad de Monterrey ya sea con la Selección Nacional o con el América, nos dábamos un tiempo para saludarnos y platicar de fútbol. También  en una larga gira por Europa en Junio de 1979.  En un receso de campeonato, estando yo en Montevideo nos encontramos para que conociera a su familia.

 Gran jugador, mediocampista defensivo, ejemplo de la “garra charrúa” y mejor persona que nos deja llenos de buenos recuerdos y anécdotas. Se va a sentir su ausencia. Lo vamos a extrañar.