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Amnistía: México pone en riesgo a migrantes centroamericanos

México — Las autoridades de México obligan de manera rutinaria a los migrantes centroamericanos a regresar a sus países, aun cuando ahí enfrentarán condiciones peligrosas, de acuerdo con un sondeo de Amnistía Internacional difundido el martes.

De los migrantes de Guatemala, Honduras y el Salvador que fueron entrevistados, 75% señaló que los agentes de inmigración de México jamás les informaron de su derecho a solicitar asilo.

“Es muy frecuente que las personas solicitantes de asilo cuya vida corre peligro en Centroamérica sean presionadas para que firmen documentos de deportación de ‘retorno asistido’”, dijo AI.

Amnistía Internacional mencionó el caso de un conductor de autobús de Honduras asesinado tres semanas después de ser repatriado por México, a pesar de que los conductores de autobús son extorsionados con frecuencia por pandillas en el país centroamericano.

El Instituto Nacional de Migración (INM) de México reconoció que hace falta hacer mejoras, pero negó que obligue o engañe a las personas para que firmen los documentos de su retorno asistido.

El INM dijo que usa diversos materiales para informar a los migrantes de sus derechos en los centros de detención, como posters, videos y folletos.

El INM también destacó que México aumentó el otorgamiento de asilo a personas que lo han solicitado.

Pocas personas relativamente solían pedir asilo en México, pero debido a las altas tasas de violencia en Honduras y El Salvador, así como la crisis política y económica en Venezuela, las solicitudes de asilo aumentaron considerablemente en los últimos cinco años.

En 2017, 14.596 personas solicitaron asilo en México, un aumento de 66% respecto a 2016. De esa cifra, se aprobaron 1.907.

El incremento registrado en 2017 se debió en parte al gran aumento de las solicitudes de asilo presentadas por personas de Venezuela. Las peticiones de personas de El Salvador y Honduras aumentaron apenas 9%.

El incremento en 2017 no fue tan grande como el que hubo entre 2015 y 2016, cuando las solicitudes de asilo se multiplicaron por 2,5. Las de hondureños y salvadoreños aumentaron a más del doble.

Según las autoridades mexicanas, los migrantes centroamericanos a menudo deciden no pedir asilo cuando se enteran de la demora para que les resuelvan. El proceso puede tardar meses y a veces años.

México permite a los cónsules de la mayoría de los países centroamericanos reunirse con los migrantes de sus países para garantizar la protección de sus derechos. Pero Amnistía Internacional criticó ese proceder.

“La práctica internacional tiende a proteger a las personas solicitantes de asilo del contacto con las autoridades consulares de su país como forma de protección contra el riesgo de identificación, represalia y violaciones de derechos humanos a manos de agentes estatales”, escribió AI.