Según muestran las cifras del INEGI, las exportaciones mexicanas en todos los rubros tuvieron aumentos de más de un digito en nuestro país mientras que el PIB general se mantiene abajo y estancado y se espera que aumente solo un 1.7% este año mientras que el sector industrial, el llamado sector secundario de la economía, permanecerá a nivel de menos 1% o en tasa negativa.
Esta "contradicción" se explica si se considera que son exportaciones impulsadas por una moneda devaluada en más de 15% en el último año y otros "factores" como la mano de obra barata que se utilizan en el país para hacer "competitivas" esas exportaciones. Eso significa un empobrecimiento creciente d ela población mexicana y de las propias empresas nacionales lo cual redunda en un bajo crecimiento y un mercado internoa estancado.
Las exportaciones mexicanas apuntaron un crecimiento anual de 14.7 por ciento en marzo, el mejor momento de que se tenga registro en más de cinco años, luego de que en julio del 2011 repuntarán en hasta 20.6, según las cifras del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
Al tercer mes los envíos al extranjero significaron ganancias superiores a los 35 mil 925 millones de dólares, de estas más de 34 mil millones, el 95.2 por ciento se trató de mercancías, y el resto, mil 719 millones fueron aportadas por la venta petrolera.
Tan sólo los bienes no petroleros se elevaron 13.2 enteros en comparación con marzo del 2016, en gran medida impulsados por las exportaciones automotrices, las cuales por sí solas, crecieron 18.7 unidades.
También destacaron por su dinamismo la exportación de productos de la siderurgia, de alimentos, bebidas y tabaco, de equipos y aparatos eléctricos y electrónicos y de maquinaria y equipo especial para industrias diversas.
Si bien el comercio de petróleo contribuyó con una mínima parte de los ingresos, frente al año pasado, al tercer mes de este ciclo
