---El descontento en que se apoya es el mismo que dio fuerza a AMLO, a Lula y el propio Javier Milei.
El mismos descontento que en México capitalizo AMLO a partir del 2002 hasta llegar a la presidencia en 2018; el mismo que regresó a Ignacio Lula a la presidencia en Brasil o desató las movilización contra Emmanuel Macron en Francia y, paradójicamente, el mismo descontento que generó el apoyo electoral a Javier Milei en Argentina después de la tibia política económica de Alberto Fernández bajo la tutela del FMI ( aunque Milei, claro está, impuso como “solución” una dosis mayor del mismo veneno y el exterminio de los ancianos y los pobres) es el que está detrás del gran apoyo electoral para Donald Trump entre la clase trabajadora y el empresariado de los Estados Unidos. No se trata de explicar esto con el término facilón y trillado de “neoliberalismo”. De lo que se trata es del proceso de DESTRUCCIÓN FÍSICA de las economías de Estados Unidos y todo el mundo occidental en general a partir de las reformas del sistema de Bretton Woods en 1971 bajo el gobierno de Richard Nixon y la guía de Henry Kissinger. Se dio paso a un sistema financiero basado en la especulación (“financiarización” del sistema) desplazando y aniquilando la actividad productiva. En México, aunque Morena y la izquierda todavía no detectan ese proceso hubo, afortunadamente, algunos investigadores de la UNAM, la U EdoMex, La U. de Veracruz y otros, que analizaron el proceso en trabajos que se hicieron a partir de finales de los 1990s.
En nuestro país esto lo conocimos como la “destrucción controlada” del gobierno de Miguel de la Madrid y el de Carlos Salinas especialmente, y en los Estados Unidos durante todos los años 1980s y 1990s, que convirtieron a esa nación en una “económica de servicios”, mandando sus industrias y plantas a México, China y otros países, dejando en el desempleo, los bajos salarios y la desesperanza a millones de familias de trabajadores mientras crecía el cáncer especulativo en Nueva York y otros centro financieros, la inmoralidad y el pensamiento liberal. Esas plantas e industrias cayeron en parte en México, en busca de mano de obra barata, facilidades fiscales y agua y energía baratas. Nuestros trabajadores, técnicos, ingenieros, los maestros se convirtieron en los más baratos del mundo y las empresas nacionales desaparecieron y se “extranjerizaron” como sucedió con las empresas “iconos” de Nuevo León.
Podríamos decir lo mismo de decenas de países en Europa o América Latina.
El descontento que generó esa destrucción es lo que está detrás de Trump y de sus propuestas proteccionistas como el alza de aranceles, bajos impuestos para las industrias que regresen, apoyo a la industria pesada, de energía etc. Igualmente, su ataque frontal a los “halcones de la guerra” o "complejo militar-industrial-financiero-mediatico" y a las “guerras perpetuas” (a donde mandan a morir a los americanos blancos y pobreza los negros, y a los hispanos y es el sustituto de la economía real para las ganancias de las corporaciones ) como Dick Cheney, usando un lenguaje y una denuncia que no se oía en EU desde que Lyndon H. Larouche fue perseguido y encarcelado, le despierta enormes simpatías entre la gente común (every day people)
https://x.com/LindaJo46384842/status/1852631356259332520...
https://www.jornada.com.mx/.../obreros-en-eu-estan...
https://apnews.com/.../election-trump-cheney-war-hawk...