Internacional

El empresario Trump, bajo amenaza del candidato Trump

Las reiteradas controversias generadas por el candidato presidencial estadounidense Donald Trump no solo son obstáculos en su marcha hacia la Casa Blanca, sino que también pueden debilitar su imperio económico al afectar a su bien más preciado: su marca.

Estampada en sus edificios de lujo y casinos, en camisas y en filetes de carne, la marca Trump es la base en la que actualmente funciona la empresa que permitió al magnate de bienes inmobiliarios acumular una fortuna de varios miles de millones de dólares.

Pero el personaje cambió: después de haber encarnado una historia de éxitos, conduce una campaña hacia la Casa Blanca que puede motivar una fuga de clientes preocupados por sus constantes polémicas con mujeres, de aspecto militar y sobre la inmigración.

"Es el inicio del fin (...) para Donald Trump, no solamente en su carrera a la Casa Blanca sino también para su marca, sus propiedades y sus negocios", afirmó recientemente el multimillonario Mark Cuban, un ferviente defensor de Hillary Clinton.

En la opinión de Cuban, el deterioro de la marca Trump es de tal naturaleza que el empresario Bernie Madoff -encarcelado por estafa- "tiene ahora una marca mejor".

Contactado por AFP, un portavoz de la Organización Trump, que concentra todas las actividades empresariales del ahora candidato presidencial, rechazó el sombrí­o diagnóstico de Cuban.

"La marca Trump se mantiene increí­blemente sólida y experimentamos enorme éxito en todos nuestros sectores de actividad", expresó el portavoz.

Como la empresa de Trump no tiene acciones en bolsa, se torna difí­cil determinar con exactitud si los inversores y clientes ya han emprendido un repliegue, aunque se comprueban señales inquietantes.

Abierto en septiembre pasado, en medio de protestas, el nuevo Hotel Trump en Washington no ha logrado ocupar su capacidad y según diversos medios de prensa ha tenido que realizar rebajas en los precios.

Mickael Damelincourt, director del hotel, aseguró en su correo electrónico enviado a AFP que ese escenario no es verí­dico.

"Con 10 años de experiencia en los Hoteles Trump, puedo decir con tranquilidad que la apertura (del establecimiento en Washington) ha sido el mayor éxito en términos de reservas", expresó.

En todo caso la controversia no se limita a Washington.

Un sondeo realizado en abril por la revista especializada Forbes indicó que cerca de la mitad de los 500 millonarios consultados afirmó que evitarí­a los hoteles y los campos de golf del grupo Trump en los próximos años.

- Sin asociación positiva -

De acuerdo con un estudio del promotor inmobiliario Redfin, los apartamentos de lujo de las torres Trump -un segmento central en la operación del grupo- se venden al precio de mercado, mientras que hace un año estos apartamentos eran un 7% más caros que otros inmuebles similares.

"La marca Trump estaba realmente asociada al lujo y a un nivel que eran suficientes para justificar un sobrecosto adicional en el mercado. Pero esta asociación positiva ha desaparecido", dijo a AFP Nela Richardson, economista jefa de Redfin.

Richardson apuntó que "ha habido eventos que han manchado a la marca Trump" y por ello es "razonable" pensar que podrán enfriar el entusiasmo de compradores extranjeros o hacer que estén menos dispuestos a pagar ese sobreprecio.

En especial, las constantes crí­ticas de Trump hacia China podrí­an tener un efecto directo sobre sus negocios, ya que los chinos forman el grueso de la demanda de los apartamentos de lujo.

Además, el mercado de esos apartamentos de lujo ya es de por sí­ "muy reducido".

De acuerdo a diversos estudios, el grueso principal de los electores de Trump, en los actuales comicios presidenciales, está en sectores populares, de forma que la empresa no podrá compensar con ellos las pérdidas registradas en los negocios.

Para Merry Carole Powers, autora de un exitoso libro sobre estrategias de mercado en Estados Unidos, numerosas marcas lograron reconstruirse después de graves crisis como accidentes ambientales o controversias polí­ticas.

Sin embargo, el caso de Trump no tiene precedentes, añadió.

"En general cuando una marca queda expuesta en una mala situación de relaciones públicas, es por un accidente. Esas marcas no se propusieron que eso ocurriera", dijo a AFP.

Y sin embargo, Trump "claramente está diciendo: 'No me importa lo que pienses'. Jamás hemos visto a una marca actuar de esa forma", concluyó Powers.