México - Por el Lic. Francisco Javier Aragón Salcido EN Dossier Político: En la disputa por la NOMINACIÓN de MORENA al gobierno de la CDMX, dos fuerzas irreductibles se enfrentaron, por un lado los activistas y científicos nacionalistas vinculados a la UNAM, IPN, COLMEX y demás parafernalia orgánica e inorgánica de la urbe Azteca ; y de la otra los pocos seguidores del destacado y capaz político de ese partido como lo es el ex priista Ricardo Monreal Ávila .
En esa virtud es muy posible que AMLO, atento a la geometría política, y escuchando a sus asesores, pero además considerando la equidad de género, HAYA PREFERIDO concitar el respaldo de la aristocracia de la inteligencia del altiplano hacia Claudia Sheinbaum, misma que está altamente acreditada ante la Sociedad Civil de México y el Mundo, QUE A UN PROVINCIANO como lo es Ricardo Monreal, quien no deja de ser un político profesional experimentado y de larga trayectoria pero que no es originario de la CDMX, ni está ligado a ninguna corriente, siendo por tanto pocos sus vínculos con esa gran e influyente y mimética comunidad ACADEMICA globalizada.
Por lo tanto la Némesis de Monreal Ávila, es que no incorporó, y por lo visto no asimiló tres variables independientes en su diagnostico, en consecuencia LE HICIERON CORRALITO los ex ceuistas de la UNAM , pienso que Ricardo Monreal creyó que era una posición política más y , que le bastaba su gran capacidad de maniobrar políticamente ya sea en los partidos, las cámaras o en su natal Zacatecas.
Ricardo debió comportarse como lo están haciendo Manlio Fabio Beltrones y Emilio Gamboa patrón del PRI; disciplinarse, y en el caso de Monreal, apostar su capital político y buscar ser el líder de la fracción parlamentaria de MORENA en el senado 2018-2024. Por otra parte creo que Ricardo Monreal no tiene la brillantez y excelencia del estadista y orador Porfirio Muñoz Ledo, que lo mismo destacó en el PRI, FDN, PRD, PARM, PT y ahora MORENA.
Ese fue su error, el no ver el PANORAMA. Si Monreal Ávila deja MORENA, no irá muy lejos. En este CONTEXTO es más que evidente, sí, que AMLO , con la incorporación de Lino Korodi ex operador de los amigos de Fox , Esteban Moctezuma Tv Azteca, y el empresario Romo ( ex de OXXO) de Nuevo León, busca religar a MORENA con el sector nacionalista de la Iniciativa Privada, así como los Millenials, Hipsters, Geek, Nerds y Emprendedores gente entre 21 y 55 años ; y en el caso de Claudia Sheinbaum, AMLO espera concitar el apoyo por un lado del 50% del los electores, como lo son las damas, y del otro , a la academia mexicana que habita la UNAM, el POLI, la Metropolitana, y el Colegio de México, con la consecuencia inmediata de neutralizar el apoyo de los académicos nacionalistas al PRI, que ha gestionado de una forma constante y amplia , el Dr. José Narro Robles.
Según sendos artículos de Wikipedia la Enciclopedia libre de Internet que para no ser escolástico, aquí solo gloso y parafraseo, por lo que me disculpo del involuntario plagio , la hibris (en griego antiguo ?βρις hýbris) es un concepto griego que puede traducirse como ‘desmesura’.
No hace referencia a un impulso irracional y desequilibrado, sino a un intento de transgresión de los límites impuestos por los dioses a los hombres mortales y terrenales. No se debe menospreciar a nadie, pues como dijo Pitágoras: Un átomo hace sombra.
Pero siguiendo con nuestra digresión histórica: En la Antigua Grecia Hibris aludía a un desprecio temerario hacia el espacio personal ajeno unido a la falta de control sobre los propios impulsos, siendo un sentimiento violento inspirado por las pasiones exageradas, consideradas enfermedades por su carácter irracional y desequilibrado, y más concretamente por Ate (la furia o el orgullo). -Soy un peleador callejero a declarado ser Ricardo Monreal, fatal -.
Como reza el famoso proverbio antiguo, atribuido a Eurípides: «Aquel a quien los dioses quieren destruir, primero lo vuelven loco». En síntesis, hybris o hibris es un castigo lanzado por los dioses.
La religión griega ignoraba el concepto de pecado tal como lo concibe el cristianismo, lo que no es óbice para que en esta civilización la hibris pareciera la principal falta. Se relaciona con el concepto de moira, que en griego significa ‘destino’, ‘parte’, ‘lote’ y ‘porción’ simultáneamente.
Heródoto lo expresa claramente en un significativo pasaje: Puedes observar cómo la divinidad fulmina con sus rayos a los seres que sobresalen demasiado, sin permitir que se jacten de su condición; en cambio, los pequeños no despiertan sus iras. Puedes observar también cómo siempre lanza sus dardos desde el cielo contra los mayores edificios y los árboles más altos, pues la divinidad tiende a abatir todo lo que descuella en demasía.
La concepción de la hibris como falta determina la moral griega como una moral de la mesura, la moderación y la sobriedad, obedeciendo al proverbio pan metron, que significa literalmente ‘la medida en todas las cosas’, o mejor aún ‘nunca demasiado’ o ‘siempre bastante’. El hombre debe seguir siendo consciente de su lugar en el universo, es decir, a la vez de su posición social en una sociedad jerarquizada y de su mortalidad ante los inmortales dioses.
En la Teogonía de Hesíodo, las distintas razas de hombres (de oro, plata, bronce, gigantes , de hierro) que se suceden unas tras otras se condenaron por su hibris. En cierto modo, la falta de Agamenón en el primer libro de la Ilíada se relaciona con la hibris al desposeer a Aquiles de la parte del botín que debería corresponderle en justicia.
En el Derecho griego, la hibris se refiere con mayor frecuencia a la violencia ebria de los poderosos hacia los débiles. En la poesía y la mitología, el término fue aplicado a aquellos individuos que se consideran iguales o superiores a los dioses. El hibris era a menudo el hamartia (‘trágico error’) de los personajes de los dramas griegos.