26/Apr/2024
Editoriales

Cómo nacieron los cierres Velcro

Para quienes conocimos desde la niñez la incomodidad de traer cadillos en la ropa luego de andar en el monte, y las dificultades para quitarlos del pantalón o del suéter, es bien lógico un cierre Veltro, aunque asombra la cantidad de aplicaciones actuales que tiene. Al principio se usaba en vez de las cremalleras de los vestidos de mujeres, después en las chamarras para el frío y después en algunos modelos de zapatos en vez de las tradicionales agujetas. Cerrar o abrir una tela con simplemente juntar las dos partes y luego darle un tirón para separarlas, es realmente cómodo. Este producto conocido erróneamente por su marca (Velcro es combinación de los vocablos franceses “velours croché” que significa terciopelo con ganchos), es una copia de la naturaleza del cadillo, y fue un ingeniero suizo llamado George de Mestral, quien lo inventó en 1951, patentándolo el 22 de octubre de ese año en su país.

En 1858 la registró en Estados Unidos y en 1960 en Gran Bretaña. ¿Cómo le hizo este ingenioso suizo para copiar el sistema natural de adhesión de una parte con otra tal como lo hacen los cadillos y los erizos? Analizó en el microscopio un erizo y vio que la superficie de estos consiste en minúsculos ganchos que se sujetan fácilmente a superficies suaves y que sean penetrables por esos ganchos. Experimentó hasta llegar a hacer bucles en forma mecánica y luego calentarlos para que se levantaran de la superficie y cortarlos para que los extremos se conviertan en ganchos. Así por un lado están los ganchos y por el otro una superficie suave y vellosa. Con sólo colocar una encima de la otra se unen y se desenganchan con simplemente separarlas con cierta fuerza. El material ideal es el nylon, por lo que su costo es bajo pues elimina el metal que normalmente utilizan las cremalleras. De Mestral vendió las patentes a Velcro, S. A., cuyo dueño es un norteamericano de origen francés llamado Jean Revaud,  quien le pagó millones de dólares por los derechos. Este sistema se ha usado hasta en fuselajes de aviones y su mayor uso se da en vestimentas y equipos para discapacitados porque su uso no requiere ninguna coordinación. A mí me regaló mi hija Pit unos tenis muy elegantes cuyo sistema de aseguramiento no es con cintas sino con velcro.