Se acabó ftx , una vez que la tercera plataforma más grande de comercio de criptomonedas y la joya de la corona en el imperio de Sam Bankman-Fried , el enigmático fundador de la empresa, se declaró en bancarrota. El Sr. Bankman-Fried, que era un defensor de una mejor regulación de las criptomonedas, se mezcló con los altos y poderosos de Washington y durante mucho tiempo fue percibido como una de las personas más confiables en una industria poco confiable, renunció como su director ejecutivo y, según se informa, está siendo investigado por los reguladores estadounidenses.
También está liquidando su empresa comercial propietaria, Alameda, y su bolsa estadounidense, ftx.us.. Hace una semana, se estimaba que Bankman-Fried valía 15.600 millones de dólares, gracias al éxito de estos negocios. Ahora todos son inútiles. Su imperio, riqueza y reputación han sido destripados.
Fue solo el 2 de noviembre que CoinDesk, un sitio web de noticias, publicó el balance de Alameda, revelando la naturaleza incestuosa de su relación con ftx . Más tarde se supo que el intercambio había prestado $ 10 mil millones de los $ 16 mil millones de criptoactivos que los clientes le habían confiado a Alameda, que supuestamente la empresa comercial utilizó para hacer apuestas arriesgadas. Las consecuencias de estas revelaciones incluyeron una caída en picada en el valor de ftt , un token emitido por ftx . Después de esta caída, Changpeng Zhao, el jefe de Binance, un intercambio rival, anunció que su empresa liquidaría sus tenencias de ftt , lo que precipitó una corrida en ftx . Binance luego se ofreció a ir al rescate, solo para echarse atrás después de mirar los libros de ftx .
