10/Oct/2024
Editoriales

EL ESCANDALO QUE CIMBRA A EU

Como reflejo de la presión global que se ha creado en torno a las 28 páginas secretas de la Comisión Conjunta del Congreso sobre el 11-S, Bernie Kerik, quien era el Comisionado de Policí­a de la Ciudad de Nueva York en el momento en que ocurrieron los ataques del 9-S de 2001, le dijo el 22 de abril a John Bachman, director del programa Newsmax Now, que algunos miembros de la Comisión del 11-S "creen firmemente que hay información en esas 28 páginas que arrojarí­a evidencia de que Arabia Saudita... [es] culpable".

Si eso es así­, dijo Kerik, "no se trata de las familias de las ví­ctimas del 11-S... Esto puede tener ramificaciones mundiales y problemas judiciales, demandas, paí­ses que van a perseguir a Arabia Saudita". Agregó quE "pienso que hay una Buena posibilidad de que tumbe a la Casa de Saud".

Kerik señaló que la amenaza de Arabia Saudita de rematar $750 mil millones de dólares en bonos del tesoro de EU en caso de que se publicaran las 28 páginas, "no es nada más que terrorismo económico, porque ellos creen que eso va a dañar a nuestro paí­s. No nos debemos acobardar por eso", indicó.

"Yo pienso que el pueblo estadounidense se lo merece", dijo. "Tiene que conocerlo, y quienquiera que sea responsable se le debe hacer responsable".

Dado que Obama está fijado en dejar un legado ficticio, agregó Kirek con ironí­a, "¿qué tal si [Obama] desclasifica [las 28 páginas] y la Casa de Saud se desmorona hasta cierto punto? Que legado habrí­a dejado".

Al mismo tiempo, Bill Maher, que dirige el programa de comentarios polí­ticos con un gran público en la TV nacional, Real Time With Bill Maher (Tiempo real con Bill Maher) señaló el 22 de abril que Estados Unidos bajo el gobierno de Bush atacó al paí­s equivocado después del 11-S. "En especial... si sabemos que fueron los saudí­es los que nos atacaron, guau, eso hace que la guerra de Irak sea vea peor. Mucha gente ha dicho siempre que 'atacamos al paí­s equivocado'. Pero ahora ya es público. Definitivamente atacamos al paí­s equivocado, y si habí­a un paí­s preciso". Ese "paí­s preciso" debe ser la monarquí­a británico-saudí­.