Todavía no asimilamos los dos golpazos que recibimos el Martes Negro pasado, tanto en la Suprema Corte de Justicia, como en las elecciones de Estados Unidos de Norteamérica… aquí en nuestro país desaparecen los organismos que antes nos daban servicio de información, y verificación de los manejos del tesoro nacional, y también desaparece -lo más importante- el estado de derecho, es decir, las defensas jurídicas que por tanto tiempo se construyeron… sin embargo, la esperanza es lo último que muere, así que estaremos orando para que se haga un milagro para que podamos sobrevivir como nación libre y soberana…///
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