09/May/2024
Editoriales

¿Qué crees que pasó?

Septiembre 25 de 1873: eleva Sebastián Lerdo de Tejada a rango constitucional las Leyes de Reforma, cuando se cumplía un año de la muerte de Benito Juárez. La Guerra de Reforma duró tres años y el bando de los liberales estaba encabezado por el presidente Juárez que buscaba frenar la injerencia de la Iglesia en los asuntos oficiales, configurando un Estado laico, mientras que los conservadores querían que la Iglesia continuara con su omnipresencia en el Gobierno mexicano.

Al triunfo de los liberales, se instalaron las leyes de reforma entre las que destacan las siguientes: Ley de Creación del Registro Civil; Ley del Matrimonio Civil; Ley sobre secularización de Cementerios; Ley de Nacionalización de los Bienes Eclesiásticos; Ley sobre Libertad de Cultos; y la Ley sobre Días Festivos Civiles. Ciertamente se le estaba arrebatando a la Iglesia su patrimonio y su monopolio religioso, derivando en que, pasado cierto tiempo, se generaran enfriamientos que le costaron al país pérdidas importantes, como la Isla de Clipperton cuando el Papa dejó de mediar en el conflicto con Francia, país que actualmente se ostenta como propietario de esta isla del Pacífico mexicano, y en enfrentamientos militares como la Campaña Cristera que costó cientos de miles de vidas. Sin embargo, la ganancia fue que el control de los actos civiles fuera trasladado al poder público elegido por la población.