QUITO - El candidato oficialista a la presidencia de Ecuador, Lenín Moreno, seguía liderando el martes el lento escrutinio de los votos de la primera vuelta electoral, pero a poco de terminar el conteo, la tendencia apuntaba a un balotaje con el opositor Guillermo Lasso en abril.
Con el 93,8 por ciento de las actas escrutadas por el Consejo Nacional Electoral (CNE), Moreno, un administrador de 63 años que padece de paraplejia, recibía el 39,18 por ciento de los votos válidos frente al 28,38 por ciento de Lasso, un ex banquero que busca por segunda vez la presidencia del país.
Moreno, ex vicepresidente del saliente mandatario Rafael Correa entre 2007 y 2013, necesita un 40 por ciento de los votos válidos más una diferencia de 10 puntos porcentuales respecto a Lasso para obtener un triunfo en la primera vuelta electoral.
La autoridad dijo el lunes que se tomará hasta tres días para tener resultados oficiales finales de la jornada electoral del domingo debido a inconsistencias en algunas de las actas, lo que ha despertado incertidumbre entre los ecuatorianos y denuncias de fraude. [nL1N1G50MJ]
Dirigentes de partidos opositores y simpatizantes de Lasso permanecían por tercer día consecutivo en las inmediaciones del CNE, en Quito, para velar por la transparencia en el conteo de votos. Las protestas se han extendido paulatinamente a otras ciudades, incluida Guayaquil, la más grande del país.
"Mi pedido al pueblo ecuatoriano es que nos mantengamos en vigilia, pero en paz", dijo el martes Lasso a una radio local, al señalar que ya diseña la estrategia para la segunda vuelta.
En los comicios del domingo, unos 9,8 millones de ecuatorianos acudieron a las urnas para decidir entre la continuidad del modelo socialista instaurado por Correa hace una década o un cambio de timón hacia una economía de libre mercado. [nL1N1G4086]
A pesar de la diferencia de más de 10 puntos porcentuales que separan a Moreno de Lasso, el balotaje sería un duro revés para el oficialismo que, liderado por Correa, ha conseguido contundentes victorias en las urnas desde que asumió el poder en el 2007.
Moreno, quien ha buscado desmarcarse del estilo confrontacional de Correa y de las acusaciones de corrupción que han salpicado su gobierno, pareciera resignado a definir la presidencia en una segunda vuelta electoral, luego de haber celebrado previamente su "triunfo" al conocerse los primeros resultados a boca de urna.
"Si es que hay una segunda vuelta será el pueblo ecuatoriano el que tome la decisión final", dijo la tarde del lunes el ex enviado de la ONU para discapacidad y nominado al premio Nobel de la Paz.
Lasso, accionista del Banco Guayaquil, del cual fue presidente por casi dos décadas, ha pedido al resto de los seis candidatos opositores unirse para enfrentar a Moreno.
Sin embargo, el banquero aún despierta recelo en parte de la población que lo asocia con la crisis financiera de 1999, que obligó a miles de ecuatorianos a emigrar dejando atrás un país sumido en el desempleo y la inflación.
En los comicios del domingo también se votó por renovar los 137 miembros del congreso y los resultados oficiales preliminares mostraban al oficialista Alianza País a la cabeza con el 39 por ciento de las curules, seguido de la alianza de partidos de centro derecha, CREO-SUMA, que apoyó la candidatura de Lasso, con el 21 por ciento de los asientos.