Ciudad de México.- El paquete económico presentado por el Ejecutivo federal al Congreso el pasado 8 de septiembre busca un superávit primario en las finanzas públicas para el próximo año, destacó la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Lo anterior, expone, pese al entorno externo adverso de volatilidad en los mercados financieros globales, un crecimiento negativo de la producción industrial de Estados Unidos con repercusión directa en México, bajos precios del petróleo y mayor probabilidad de políticas proteccionistas en el mundo.
En el Informe Semanal de la vocería, expone que la reingeniería y eficientización del gasto forma parte del cambio estructural que se ha propuesto la presente administración, y que comenzó con la implementación de un Presupuesto Base Cero en 2016, para frenar el impacto de un entorno internacional adverso.
Las medidas presentadas permitirán continuar con el cambio estructural y contribuyen a seguir protegiendo la economía de las familias mexicanas, argumenta.
La SHCP afirma que con el paquete se prevé alcanzar un superávit primario a través de un ajuste en el gasto programable por un monto equivalente a 1.2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) respecto del Presupuesto 2016.
Asimismo, privilegia proyectos de inversión y programas sociales más efectivos, y propone adelantar a partir de enero del próximo año la liberalización del precio de las gasolinas y el diésel de forma regional y ordenada; además de que no crear nuevos impuestos ni incrementa los existentes.
De igual forma, indica que el Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación para 2017 también representa la contención del gasto de servicios personales y la disminución de los gastos de operación, aunado a la adopción de alternativas de financiamiento, en especial en materia de inversión pública.
En cuanto a las estrategias, indica la contención de los recursos destinados a servicios personales y la reducción en gastos de operación; en tanto, se privilegian los programas que contribuyen a la reducción de la pobreza y prioriza la inversión productiva.
La dependencia señala que para el ejercicio fiscal 2017 propone la asignación de dos mil millones de pesos para proyectos de infraestructura económica y la asignación de recursos para proyectos de desarrollo de las Zonas Económicas Especiales.
Respecto a las finanzas públicas de las entidades federativas y municipios, prevé transferir mil 637 mil millones de pesos, 45.1 por ciento en participaciones, 42.9 en aportaciones federales y 12 por ciento en otros conceptos; e incluye un nivel de gasto corriente estructural de 360.4 mil millones de pesos.
Afirma que el paquete económico incluye medidas que buscan impulsar a sectores estratégicos, como los esquemas de simplificación para pequeñas empresas, la exportación de servicios intangibles.
Además de un estímulo fiscal a la investigación y desarrollo tecnológico y otro para la inversión de estaciones de recarga de vehículos verdes, ambos del 30 por ciento, y finalmente, la deducción del Impuesto Sobre la Renta a las aportaciones de personas a sus planes de retiro.
El marco macroeconómico previsto en los Criterios Generales de Política Económica (CGPE) considera un crecimiento económico para 2017 entre 2.0 y 3.0 por ciento, una inflación de 3.0 por ciento con un margen de un punto porcentual, un tipo de cambio de 18.2 pesos por dólar.
Asimismo, un precio de la mezcla mexicana de crudo de exportación de 42 dólares por barril, una plataforma de producción de un millón 928 mil barriles diarios, es decir, 202 mil barriles diarios menos que en 2016.
El paquete prevé además ingresos presupuestarios por cuatro billones 309 mil millones de pesos, un incremento de 9.7 por ciento de los ingresos tributarios, una reducción de 15.7 por ciento real de los ingresos petroleros en relación con la Ley de Ingresos 2016.
De igual forma, un gasto de cuatro billones 804 mil millones de pesos, 1.0 por ciento real, menor a 2016, precisa la Secretaría de Hacienda.