Septiembre 14 de 1945: nace en Linares, Sócrates Rizzo García, quien sería economista y político, diputado, alcalde de Monterrey y gobernador del Estado. Hijo de Agapito Neftalí Rizzo y Jovita García Decanini, estudió desde la educación secundaria en Monterrey -Secundaria núm. 5, Profr. Macario Pérez- hasta la licenciatura en la Facultad de Economía en la UNL. Luego de obtener su título universitario estudió una maestría en el Colegio de México. Después fue a la Universidad de Chicago a estudiar su doctorado en economía internacional y finanzas públicas.
En 1975 ingresó a trabajar al gobierno federal llegando a ser director general de política económica y social. Luego fue diputado federal siendo presidente de la comisión de presupuesto y cuenta pública, sustituyendo a Luis Donaldo Colosio. En Nuevo León realizó una vertiginosa carrera política que le llevó a la alcaldía de Monterrey y luego a la gubernatura del estado. Siendo gobernador creó la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, ciudadanizó la Comisión Estatal Electoral, y envió al Congreso la iniciativa que creó la Contaduría Mayor de Hacienda del estado, hoy Auditoría Superior. Su amplia obra pública incluye el túnel de la Loma Larga, el Museo de Historia Mexicana y el Canal de Santa Lucía, la Biblioteca Rangel Frías, la presa El Cuchillo y su acueducto El Cuchillo – Monterrey, las plantas de tratamiento de aguas negras que llevaron a Monterrey al liderazgo por ser la primera Ciudad de Latinoamérica en tratar sus aguas residuales al cien por ciento. Se enfrentó con el presidente Zedillo quien buscaba golpear a su antecesor Salinas de Gortari y como Rizzo era su amigo, se ensañó con él. Se construyó un escenario artificial de conflicto para vaciar la presa El Cuchillo que alimenta de agua potable a la Ciudad, y al defender los derechos de Nuevo León se amparó para que se cerraran las compuertas y de ahí en adelante fue perseguido políticamente junto a algunos de sus funcionarios hasta que en 2013 el gobierno de Fernando Canales le entregó un documento de 60 cuartillas que concluye con su inocencia a los cargos inventados.
Le deseamos una larga vida al ex gobernador Sócrates Rizzo, uno de los pocos personajes políticos que transitan tranquilamente por las calles de la Ciudad sin guardaespaldas ni chofer.
