Septiembre 18 de 1890: nace en Monterrey Enrique Gorostieta Velarde, quien sería militar destacado en la Guerra Cristera. Descendiente de una connotada familia vasca de origen, hijo de Enrique Gorostieta González y María Velarde Valdéz-Llano, y nieto del coronel Nicolás Gorostieta. Tras estudiar su educación primaria en nuestra Ciudad, ingresó en 1906 al Colegio Militar del que salió en 1911 antes de terminar formalmente sus estudios, pero con el grado de Teniente de Artillería. Se inscribió en el ejército cuando gobernaba Madero, y luego Huerta. En abril de 1914, ya siendo coronel, participó a las órdenes del general Rubio Navarrete en la defensa de Veracruz, lo que le valió para llegar a ser General de Brigada en el gobierno de Victoriano Huerta. Al caer Huerta, Gorostieta continuó en el ejército hasta 1914 y luego salió del país. Regresó en 1922 y casó con Gertrudis Lasaga. Este matrimonio perdió a su primer hijo en 1924, pero luego procrean a Enrique, Fernando y Luz María. En 1927 Gorostieta Velarde fue contratado por la Liga para la Defensa de la Libertad Religiosa, para que organizara un ejército de Cristeros que luchara contra el gobierno federal el cual encabezaba los integrantes del Grupo Sonora. Su sueldo era de 3 mil pesos oro al mes, y combatió en Michoacán, Zacatecas, Jalisco, y Colima. Sobre la marcha, Gorostieta se convirtió en católico, y como en todas partes hay traición, cuando no lo esperaba, fue asesinado en Atotonilco El Alto, en la Hacienda del Valle, a la edad de 38 años, faltando unos días para que se firmara la paz entre los representantes de las dos fuerzas en pugna. Enrique Gorostieta es una figura local importante, pues, aunque haya empezado su participación militar como mercenario, se transformó en un feligrés dispuesto a perder todo por sus creencias. Su vida fue llevada a la pantalla grande en la película “Cristiada” estrenada en el año 2012, y sus familiares se sienten orgullosos de su trayectoria.
Editoriales