Internacional

Discusiones entre Cameron y sus socios de la UE se prolongan hasta la madrugada

BRUSELAS - El primer ministro británico, David Cameron, pasó gran parte de la noche del jueves al viernes discutiendo en Bruselas con sus socios de la Unión Europea, que están decididos a limitar las concesiones sobre la mesa para tratar de mantener al Reino Unido en el bloque.

Lí­deres y diplomáticos europeos dijeron que aún parecí­a viable alcanzar un acuerdo antes del final de la cumbre el viernes que permita a Cameron volver a Londres y poner en marcha una campaña para seguir en la UE de cara a un referendo de junio, pero algunos consideran que los obstáculos pendientes son considerables.

Una cena nocturna que se extendió más de cinco horas fue dedicada a discutir una vez más la respuesta a la crisis inmigratoria en Europa, lo que hizo que el plan de sostener un "desayuno inglés" el viernes entre los 28 lí­deres para tratar de cerrar un acuerdo se haya convertido en un "brunch" o almuerzo de media mañana.

"Podrí­a llevar más tiempo de lo que piensan", dijo el primer ministro irlandés, Enda Kenny, a la salida del centro de la cumbre, donde Cameron permaneció encerrado durante la noche en discusiones con funcionarios de alto rango de la UE, el presidente francés, Francois Hollande, y los primeros ministros de Bélgica y la República Checa.

"Por ahora hemos hecho algunos avances, pero aún queda mucho por hacer", dijo el presidente de la cumbre, Donald Tusk.

Cameron finalmente salió tras su última reunión poco después de las 05.30 hora local (0430 GMT), sin realizar comentarios.

Anteriormente, habí­a hecho un llamado a los lí­deres de la UE para que lo ayudaran a resolver la cuestión de la adhesión a la Unión Europea de Reino Unido aceptando un pacto "creí­ble" que pueda vender al público británico.

No obstante, diplomáticos que asistieron expresaron su frustración por la falta de concesiones por parte de algunos socios que se resisten a la pretensión de Cameron de eludir la regulación de la UE y reducir la inmigración. "Yo dirí­a que el proceso se presenta difí­cil, podrí­a ser una noche muy larga", dijo un funcionario británico a la prensa.