Según Fabrice Leggeri, director de control de fronteras de la Unión Europea, FRONTEX, el hecho de que ahora hayan pocos refugiados que utilicen la ruta del Mar Egeo para llegar a Europa, no debe malinterpretarse como una señal de que está disminuyendo el flujo de refugiados. Por el contrario: están en camino unos 300,000 refugiados del occidente de ífrica a la costa norte de ífrica, con la esperanza de conseguir pasaje para Europa. Además, se esperan decenas de miles de refugiados del este de ífrica.
Ahora la ruta principal es, de nuevo, del norte de ífrica a Italia, en donde los refugiados están escapando de la miseria económica de países como Senegal, Gambia, Costa de Marfil y Niger. Leggeri no dijo lo que es evidente, es decir que el occidente de ífrica (al igual que muchas otras regiones en crisis) necesita urgentemente un rápido desarrollo económico, que Europa les ha negado. Leggeri habló de cierta ayuda a Italia, pero aparte de esto, convirtió todo el asunto de los refugiados en un asunto de seguridad y protección para los europeos. Según los planes de la UE, FRONTEX sería reemplazada este verano por una agencia de control fronteriza más rígida y "robusta".