La conferencia internacional sobre el clima de este año será mucho más reducida que las conversaciones del año pasado en Dubai.
La próxima semana, líderes mundiales, negociadores, grupos de presión y ONG se reunirán en Bakú, capital de Azerbaiyán, con motivo de la COP29. La conferencia de la ONU sobre el clima se ha bautizado como la "COP de las finanzas", ya que los países deben fijar este año un nuevo objetivo mundial para la financiación de la lucha contra el cambio climático. De cara a la COP30, que se celebrará en Brasil el año que viene, también se espera que presenten compromisos nacionales firmes sobre el clima, también conocidos como Contribuciones Determinadas a Nivel Nacional o NDC (por sus siglas en inglés).
Más de 100 jefes de Estado y de Gobierno han confirmado su asistencia, según fuentes de la ONU. Sin embargo, varios líderes mundiales y funcionarios gubernamentales ya han dicho que no viajarán a Bakú. A continuación le explicamos quiénes no asistirán y por qué.
¿Qué líderes de la UE no asistirán a la COP29?
En las últimas semanas, varios líderes europeos han anunciado que no asistirán a la COP29. Un portavoz confirmó a 'Euronews' a principios de esta semana que la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, no asistirá. Afirmaron que, dado que la Comisión se encuentra en una fase de transición, "la presidenta se centrará por tanto en sus obligaciones institucionales". Von der Leyen se prepara actualmente para su segundo mandato, que comenzará el 1 de diciembre.
En su lugar, la UE estará representada por el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, el responsable de Política Climática, Wopke Hoekstra, y el Comisario de Energía, Kadri Simson.
El presidente francés, Emmanuel Macron, tampoco asistirá a la cumbre del clima, al parecer por celebrarse en Azerbaiyán Las relaciones entre ambos países son tensas desde que el año pasado París condenara la ofensiva militar de Azerbaiyán contra los separatistas armenios de la región separatista de Karabaj.
Tampoco asistirá el líder de otra superpotencia europea. El canciller alemán, Olaf Scholz, ha anunciado que no viajará a la COP29 tras la ruptura de su coalición de Gobierno el miércoles. Scholz tenía previsto asistir a las negociaciones sobre el clima que se celebrarán en Bakú entre el lunes y el martes, pero ha dado marcha atrás en su decisión tras la ruptura del Gobierno de coalición tripartito alemán.
Brasil, Reino Unido y Rusia: ¿Qué otros líderes mundiales no estarán en Bakú?
Dado que la COP29 se celebra pocos días después de las elecciones estadounidenses, el presidente Joe Biden no asistirá. Es el segundo año consecutivo que se salta las negociaciones mundiales sobre el clima. La delegación estadounidense estará encabezada por John Podesta, actual asesor principal del presidente para política climática internacional.
Tras sufrir una lesión en la cabeza el mes pasado, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva también canceló su viaje a Bakú. Está previsto que el país acoja la COP30 en Belem el año que viene.
El Rey Carlos tampoco asistirá a la cumbre, ya que el Gobierno del Reino Unido decidió no elegirle como representante mientras continúa recuperándose de un cáncer. El monarca tiene un largo historial de defensa del cambio climático y ha asistido a anteriores conferencias de la ONU.
El presidente ruso Vladímir Putin no asistirá a la conferencia de la ONU sobre el clima y la delegación del país en la COP29 estará encabezada por el primer ministro Mikhail Mishustin. En octubre, el embajador ucraniano ante la UE, Vsevolod Chentsov, declaró a Politico que la comunidad internacional debería evitar las conversaciones si Putin asistía.
El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, el primer ministro indio, Narendra Modi, el presidente chino, Xi Jinping, el sudafricano, Cyril Ramaphosa, y el primer ministro australiano, Anthony Albanese, también parecen faltar este año a la conferencia sobre el clima.
"Una pérdida total de tiempo": Papúa Nueva Guinea se retira de la COP29
En agosto, el primer ministro de Papúa Nueva Guinea, James Marape, anunció que el país no asistiría a la COP29 como protesta contra las grandes naciones por la falta de "apoyo rápido a las víctimas del cambio climático". El país ha declarado que adopta esta postura en beneficio de todas las pequeñas naciones insulares. Rodeada de océanos y hogar de la tercera mayor extensión de selva tropical del planeta,
Papúa Nueva Guinea es extremadamente vulnerable a los efectos del cambio climático. Está siendo asolada por impactos como la subida del nivel del mar y los desastres naturales.
A falta de pocas semanas, el ministro de Asuntos Exteriores, Justin Tckatchenko, confirmó que el país se retiraría de las conversaciones de alto nivel de la cumbre sobre el clima. Lo calificó de "pérdida total de tiempo".
Afirmó que Papúa Nueva Guinea "no tolerará más promesas vacías e inacción" mientras su pueblo sufre las devastadoras consecuencias del cambio climático. Tckatchenko añadió que las tres últimas reuniones de la COP "han dado vueltas en círculos, sin producir resultados tangibles para los pequeños estados insulares". Papúa Nueva Guinea enviará una pequeña delegación de funcionarios, pero no asistirá ningún ministro para participar en las conversaciones de alto nivel.
COP29: Una conferencia sobre el clima más pequeña en general
El número de asistentes a las conferencias de la ONU sobre el clima en los últimos años ha parecido crecer exponencialmente. El año pasado, un total de 83.884 personas asistieron a la cumbre de Dubái. El recinto de la Expo City era tan grande que los delegados tuvieron que desplazarse en buggies de golf. Se ha denunciado la hipocresía de decenas de miles de personas que vuelan desde todo el mundo para asistir a las conferencias.
Tras la cifra récord del año pasado, Simon Stiell, responsable de la ONU para el clima, declaró a principios de año que esperaba ver menos gente en Bakú. Ante el grupo de reflexión londinense Chatham House, declaró que "el tamaño no se traduce necesariamente en la calidad de los resultados".
Este año, la CMNUCC ha acordado limitar la asistencia a unas 40.000 personas, aproximadamente el mismo número que asistió a la COP26 de Glasgow (Escocia) y menos de la mitad que el año pasado en Dubái.