Los reporteros de la fuente del Congreso local ya sufren las consecuencias del receso legislativo, desde que se clausuró el periodo ordinario de sesiones, pues la comida caliente que recibían los reporteros de manera gratuita los lunes, los martes y los miércoles, se suspende porque esa es la costumbre.
Las comidas se dan tres veces a la semana cuando hay periodo.
Y con este receso, la Diputación Permanente sólo sesiona los viernes, pero los reporteros tienen de manera gratuita galletas, refrescos o café.
Así que como no hay fecha de periodos extraordinarios todavía, los reporteros simplemente tendrán que pagar para poder comer. Así que la racita tiene que aguantar vara.
Y conformarse con comer canapés cuando hay exposiciones o eventos especiales como en una exposición de pinturas que hubo ayer.