Espectáculos

Nuevo intento de Universal de resucitar sus monstruos con Paul Feig al frente

 

Paul Feig ha dirigido "La boda de mi mejor amiga", y "Cazafantasmas".

Ahora ha sido reclutado por Universal para llevar a cabo un nuevo intento de resucitar a sus legendarios monstruos. El realizador estará al frente de Dark Army, donde juntará a los personajes más famosos de la casa, como Drácula, El Hombre Lobo y el monstruo de Frankenstein, con otros personajes nuevos, creados para la ocasión. Por ahora no se han dado más detalles del proyecto, ni siquiera en lo referente al reparto, si bien todo indica que no estará presente Melissa McCarthy, actriz fetiche de Feig.

Paul Feig tiene pendiente de estreno Last Christmas, comedia con Emilia Clarke y Emma Thompson. La primera da vida a Kate, joven londinense cuyas malas decisiones vienen acompañadas por el sonido de campanas en los zapatos que utiliza en su trabajo, ya que hace de elfo en unos grandes almacenes en Navidad.

"Hacemos contrabando", admite una vendedora, Blessing Chiona, cuya mercadería cabe en un palé incrustado en el barro.

Junto a ella, decenas de vendedores esperan a los clientes bajo el sol. Ese día, se venden dos litros de aceite a 24 dólares en efectivo, contra 34 en los supermercados.

Bajo su paraguas, para protegerse del sol, Blessing Chiona envía mensajes con sus listas de compras a sus repartidores, que viajan entre Zimbabue y Sudáfrica a bordo de minibuses cargados de pasajeros y mercancías.

Como si todas esas dificultades no bastaran, los zimbabuenses tienen que soportar largos cortes de electricidad, de hasta 18 horas por día.

Misheck Masarirevhu, también vendedor en Mbare, ha encontrado la solución. Con un micropanel solar, carga durante el día una batería de automóvil en la que conecta cada noche su teléfono móvil.

Jocelyn Chaibva, farmacéutica de 59 años, se levanta a mitad de la noche, cuando ha vuelto la electricidad, para lavar su ropa.

"Para poder vivir aquí, hace falta un doctorado" de supervivencia, resume uno de sus colegas, Luckmore Bunu. "Un extranjero no aguantaría aquí ni un mes. Pero nosotros estamos acostumbrados".